Cada vez con más frecuencia, las parejas enfrentan problemas de infertilidad causados, principalmente en el caso de las mujeres, por la decisión de postergar el momento de la reproducción, el consumo de alcohol, tabaco y el exceso de peso corporal, aseguraron médicos especialistas.

Martha Luna, codirectora de Reproductive Medicine Associates (RMA) de Nueva York, Estados Unidos, también resaltó la importancia que ha adquirido en los pasados 15 años el desarrollo de medicamentos elaborados a partir de ingeniería genética (biotecnológicos) para apoyar los tratamientos de reproducción asistida.

Durante un seminario sobre biotecnológicos e infertilidad, la especialista señaló que hasta 15 por ciento de las parejas presenta algún problema para tener un hijo, aunque el número se incrementa en personas de más de 35 años. Una de las principales causas es la disfunción ovulatoria, la cual forma parte de un proceso natural que se presenta conforme aumenta la edad de las mujeres.

Mencionó que alrededor de 85 por ciento de las parejas que desean una concepción lo consiguen en el primer año, mientras que en el 15 por ciento restante existen factores que obstaculizan la procreación y requieren de ayuda médica especializada.

Una tercera parte de estos casos se debe a una disfunción ovulatoria, es decir, no existe producción de óvulos en el aparato reproductor femenino o ésta es deficiente. Le siguen los padecimientos en el endometrio, trompas de Falopio, o los derivados de cirugías previas e infecciones.

En 25 por ciento de las parejas la causa es inexplicable, comentó la especialista, durante el foro organizado por el laboratorio farmacéutico Merck Serono.

Resaltó la importancia que ha tenido el avance de la tecnología para el desarrollo de medicamentos útiles en los procedimientos de reproducción asistida, los cuales han mejorado en calidad y seguridad para las pacientes.

José Carlos Tapia, gerente médico del área de Biotecnología de Merck Serono, señaló que de utilizar orina de mujeres menopáusicas (en los años 60) para la fabricación de las hormonas que estimulan la producción de óvulos, desde hace 15 años existen en el mercado sustancias desarrolladas mediante ingeniería genética, y a partir de 2003, productos más avanzados que permiten medir las dosis exactas de la hormona folículo estimulante, para incrementar la cantidad y calidad de los óvulos.

El medicamento se aplica a la mujer en forma de inyecciones como parte de un procedimiento de reproducción asistida y luego de una serie de estudios clínicos para determinar la causa de la infertilidad.

Tapia advirtió sobre la importancia de que estos tratamientos, entre ellos la fertilización in vitro, se realicen bajo la supervisión de especialistas y en instituciones de calidad reconocida.