Machete y El cisne negro abren el Festival de Cine de Venecia
Jueves 2 de septiembre de 2010, p. a10
Venecia, Italia, 1º de septiembre. Los antihéroes latinoamericanos de Machete, el nuevo filme de acción del director estadunidense de origen mexicano Robert Rodríguez, y el thriller sicológico El cisne negro, de Darren Aronofsky, abrieron este miércoles la 67 edición del Festival de Cine de Venecia.
Ahí, el cineasta Guillermo Arriaga afirmó que México requiere una nueva narrativa que lo aleje de la violencia, durante la presentación de su cortometraje El pozo, que compite en una sección del festival.
La violencia no conduce a nada... creo que no beneficia a nadie, ni siquiera al narcotráfico. No creo que incluso ellos salgan beneficiados
, declaró Arriaga.
El escritor y realizador, quien funge como miembro del jurado de esta edición del certamen cinematográfico más antiguo del mundo, reconoció que la situación que vive actulalmente México lo afecta en su vida.
Me afecta la violencia, nos afecta a todos en el país, nos limita, nos constriñe, nos deprime, pero no podemos dejar de hacer nuestra vida. Tenemos que seguir adelante y seguir luchando para hacer un México mejor
, comentó el guionista de Amores perros.
Es momento de tomar decisiones importantes
“Creo que México tiene que hacer una profunda reflexión hacia dónde vamos, qué queremos como país, cuál es la narrativa que vamos a crear.
En lo personal creo que es momento de tomar decisiones importantes. Al gobierno, al Estado, le compete escuchar, tiene que ser muy sensible a la circunstancia histórica
, apuntó.
“El pozo –realizado en el contexto de los festejos por el bicentenario– es una reflexión sobre lo que significa México a lo largo de sus 200 años, y todas esas víctimas silenciosas que ha provocado la violencia”, explicó.
Los temas que he tratado: la frontera, la migración, la violencia, creo que son los temas (de México), y lo mejor es que el arte refleje luz hacia donde no la hay
, concluyó el cineasta.
En tanto, los héroes de Rodríguez, feos pero buenos, son todos latinoamericanos indocumentados, explotados, víctimas del despiadado sistema del narcotráfico en la frontera entre México y Estados Unidos y luchan a su manera contra un sistema injusto, corrupto y malvado.
Crecí con el problema de la explotación, pero el filme no es sólo sobre eso; tiene como primer objetivo divertir
, sostiene Rodríguez, quien estrenó su nueva cinta en Venecia fuera de concurso.
Gracias a un lenguaje paradójico y provocador, por su alta dosis de sangre y humor negro, el cineasta, quien llegó con sombrero negro de ala ancha acompañado por la actriz Jessica Alba y el protagonista, Danny Trejo, aborda muchos aspectos de la actualidad en esa zona fronteriza.
Otro tipo de antihéroe, esta vez bello pero autodestructivo, es el protagonizado por la bailarina de danza clásica Nina, la hermosa actriz Natalie Portman, en el filme El cisne negro, de Aronofsky, que abre el concurso. La compleja carrera de una bailarina clásica que se enfrenta a sus propios límites en busca de la perfección, así como a sus delirios enfermizos, es narrada por Aronofsky con el ritmo de un thriller sicológico.
Por su parte, el director iraní Jafar Panahi, quien fue liberado de prisión meses atrás, dijo el miércoles que no se le permitió dejar su país para asistir al Festival de Cine de Venecia.
En un comunicado enviado al festival, donde se exhibe su corto The accordion, Panahi informó que se le prohibió oficialmente filmar películas en los cinco años pasados.
Pese a haber sido liberado, aún no soy libre de viajar fuera de mi país para concurrir a festivales cinematográficos
, señaló el galardonado director.