El gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, dijo que aún no hay datos para sentar o descartar que la delincuencia organizada perpetró los asesinatos del alcalde de Doctor González, Prisciliano Rodríguez Salinas, y su chofer, Eliseo López Riojas.

Tras montar una guardia de honor durante las exequias del gobernante, en el auditorio municipal de Doctor González, el mandatario añadió que no se descarta ninguna línea de investigación y los avances se darán a conocer oportunamente.

Tras el asesinato del segundo alcalde neoleonés en menos de mes y medio, Medina señaló que el momento actual es complicado, pues hay una preocupación normal que no impide a los servidores públicos proseguir con su trabajo sino les hace estar alertas y tomar precauciones para instrumentar las medidas de seguridad adecuadas.

Dijo que su administración vigilará el desarrollo de las investigaciones y garantizará que los proyectos del fallecido alcalde continúen, además de reforzar la seguridad en el municipio y la zona noreste del estado.

Hasta hoy la procuraduría local ha interrogado a más de 15 familiares de las víctimas, funcionarios y policías municipales, e investiga los posibles móviles del doble homicidio cometido la noche del jueves para detener a los responsables.

La dependencia dijo que analiza los conflictos que tuvo Rodríguez Salinas con lugareños por disputas de terrenos y el interés que pudo tener la delincuencia organizada en su ejecución, aunque supuestamente no había recibido amenazas.

A su vez Álvaro Ibarra, líder estatal priísta, lamentó que el Partido Acción Nacional (PAN) apueste a desestabilizar el estado. Demandó a su dirigencia respetar la memoria del difunto alcalde, y censuró su afán de capitalizar el homicidio al vincularlo a los resultados del gobierno estatal en materia de seguridad.

Este domingo los restos del munícipe serán trasladados a la plaza principal de Doctor González, donde se efectuará un homenaje póstumo. Después habrá una misa de cuerpo presente y finalmente se le inhumará en el panteón local.

Por su parte, el dirigente nacional del PAN, César Nava, pidió a los gobernadores hacer la parte que les toca en la lucha contra el crimen organizado, pues muchos no actúan de manera corresponsable.

En Querétaro, donde participaría en una asamblea para jóvenes de su partido, el dirigente consideró que no es fortuito cuanto ocurre en Nuevo León; y tampoco es algo aislado ni ajeno a las sumisiones del gobierno local. En esa y otras entidades –dijo– no ha habido fortalecimiento ni renovación de las policías, y los gobernadores esperan que la Federación haga la tarea.

Sobre los asesinatos de los alcaldes nuevoleoneses de Doctor González y Santiago, Nava consideró que es momento de que todos hagamos nuestra parte, de lo contrario seguiremos lamentando acontecimientos como estos que a todos duelen e indignan.

El coordinador de los senadores panistas, José González Morfín, externó su preocupación por los ataques contra los ediles, y opinó que las autoridades locales tienen mucho que decir.

Recordó que en Chihuahua fue atacado el viernes el alcalde electo del municipio de Gran Morelos, Ricardo Solís Manríquez, y solicitó al gobernador del estado, José Reyes Baeza, poner mucha atención en lo que está pasando, así como al gobierno federal hacer su parte, si se quiere resolver el problema de la inseguridad y el ataque frontal de la delincuencia organizada contra las instituciones.