uando concluía unas Reflexiones sobre la destitución de la senadora colombiana Piedad Córdoba, comenzaron a llegar inverosímiles noticias de Ecuador. He pasado horas escuchándolas. A medida que los minutos pasan, la efervescencia crece.
A las 5:12 PM hora de Cuba, las condenas al Golpe se multiplican. Los líderes latinoamericanos con más prestigio, como Chávez y Evo, hacen oír sus enérgicas denuncias. La OEA reunida está sin alternativas. Los miembros se indignan y hasta la Chinchilla protesta; incluso, el nuevo Presidente de Colombia ha dicho que apoya a Correa.
El Presidente Rafael Correa se muestra firme e indoblegable. El pueblo está mucho más organizado. El Golpe a mi juicio está ya perdido.
Hasta Obama y la Clinton no tendrán más alternativa que condenarlo.
Septiembre 30 de 2010
5:38 pm