Renovado, el Nacional de las Culturas reabre con la muestra Pueblos originarios de Canadá
En reciprocidad, México llevará el esplendor de la cultura maya a Toronto y Otawa
Jueves 7 de octubre de 2010, p. 4
Los museos atraviesan una época dorada en muchos países, se han convertido en algo muy popular a causa del turismo, pero también porque las personas quieren entender más
, afirma Victor Rabinovitch, presidente y jefe ejecutivo de la Canadian Museum of Civilization Corporation, responsable del Museo de las Civilizaciones, el más grande de Canadá, y el de la Guerra, localizados en Ottawa, recintos que reciben un millón 625 mil visitantes cada año.
Ravinovitch se encuentra en México para participar en la inauguración de la muestra Pueblos originarios de Canadá: obras maestras del Museo de la Civilización, en el renovado Museo Nacional de las Culturas, que hoy reabre sus puertas con esa exposición y su acervo permanente.
Se trata de una exhibición única que llega al país después de sus escalas en China y Japón. Ésta será la última ocasión que esta muestra, integrada por 150 objetos, salga del museo canadiense.
En retribución, México llevará a Canadá una muestra de la cultura maya, en 2011 a Toronto y en 2012 a Ottawa, ciudad sede del Museo de la Civilización, cuyo presupuesto anual es de 70 millones de dólares canadienses, poco más de 865 millones de pesos al tipo de cambio de este miércoles.
En la terraza de un hotel del Zócalo, Rabinovitch habla con La Jornada acerca de la exposición, pero también de qué ocurre con los museos frente a la tecnología, los retos que enfrentan y la necesidad de ver el pasado como algo vivo, que da identidad a cada país.
Ahora, subraya, “estamos en una fase en la que la complejidad de los museos les da popularidad. Parece que va a permanecer así. Pero los profesionales de esos recintos tienen que hacer su trabajo, no se trata de pensar ‘somos especiales y privilegiados, y no pueden entrar en mi espacio’, porque entonces aislarán a los museos del resto de la población. Los espacios museísticos exitosos son como el buen periodismo: ponen la información disponible a disposición de las personas”.
Aun en el siglo XXI, inmersos como estamos en la tecnología que permite visitas virtuales a los museos, “siempre necesitamos regresar al punto fundamental: un museo es al objeto físico como los archivos son al papel y la biblioteca a los libros impresos y al material impreso.
“Un museo es el lugar donde las cosas de importancia ocurren y son preservadas y estudiadas. Si decimos siglo XXI y decimos objetos nunca más, significaría que en tal centuria negamos la importancia de la historia, tanto de la antigua como de la contemporánea.
Si decimos que vamos a vivir de una manera no histórica, entonces no necesitamos museos, tampoco archivos ni ninguna clase de registro. Si entendemos que ése es el origen de los museos, entonces la pregunta siguiente es cómo consigues acceso a lo que está dentro del museo. Esa pregunta es la más desafiante en este siglo. La digitalización abre las posibilidades de lo que un museo puede hacer.
La importancia de la historia
–Parece tema de ciencia ficción la posibilidad de que en algún momento los museos sean sólo virtuales.
–No es tan ciencia ficción. La importancia de los museos como la entendemos es que puede poner los objetos reales en exhibición, muchos de éstos son icónicos, grandes símbolos de nuestra sociedad, de los avances culturales o de la actividad militar, pero ¿puede la imagen digital remplazar el objeto real? No en nuestro tiempo.
“Los objetos digitales pueden ser manipulados de forma positiva, pueden hacerse acercamientos por ejemplo, pero el objeto es tridimensional, es físico. Lo que buscamos ahora, lo que vemos es una gran complementariedad entre la técnica de la digitalización, se hace una fotografía en todas dimensiones y después hacemos que esa fotografía sea accesible y contenga información adicional.
“El reto real para los museos, no es si serán útiles en el futuro; el gran desafío es para quienes trabajan en ellos y consiste en lograr que las exhibiciones sean más interesantes y accesibles al público.
Un buen museo debe ser capaz de poner la información al alcance del público, debe ser capaz de extender la exhibición a la web. Por tanto, si el público quiere saber más puede hacerlo. El objeto real y la digitalización no están en competencia, se complementan. El público puede ver el objeto en el museo, interesarse e ir a la información en Internet o viceversa.
Son muchos los retos, añade el especialista, y entre ellos figuran los recursos financieros, usarlos de manera adecuada y con calidad, que la información sea accesible y que el público reconozca la importancia de la historia.
“El entendimiento de las personas y sus culturas, así como sus comunidades es, al menos para nosotros en Canadá, sine qua non. Somos un país multicultural, creemos en eso. Ser multicultural significa reconocer las múltiples identidades y formas de expresar valores e ideas, especialmente entre los indígenas. Sólo porque los europeos vinieron hace 400 o 500 años y sólo porque ahora tenemos un millón de inmigrantes al año, no significa que los pueblos indígenas no cuenten. Tenemos que darles voz y poder para que ellos creen sus voces y se expresen a sí mismos.”
En la muestra Pueblos originarios de Canadá... se presentará esa multiculturalidad y diversidad, refiere Rabinovitch.
En Canadá existen 55 grupos nacionales reconocidos entre la comunidad aborigen, muchas lenguas, formas de vivir y la exhibición trata de reflejar esto. No es como una película estadunidense de vaqueros, donde todos lucen iguales, son completamente diferentes. Los tipos de ropa que mostramos, la caza tradicional, la vida, la cultura de la comida. Verán objetos de un valor impresionante, no necesariamente de oro o plata sino los mejores de su tipo.
Rabinovitch se pregunta, ¿para México qué significa esta exposición? Y se responde: “Es otro grupo de culturas y la gente está interesada en la gente, siempre hemos estado interesados en otras culturas.
En Canadá uno de los grandes desarrollos ha sido el redescubrimiento de los indígenas como parte de la identidad nacional. No sé qué pasa en otros países, pero en Canadá es lo que estamos aprendiendo.
En el contexto de esa muestra se realizará, el 21 y 22 de octubre, un diálogo denominado Primeras naciones, con representantes de México y Canadá.
