Londres, 11 de octubre. La rehén británica que murió el viernes en Afganistán durante una operación de rescate pudo haber perecido a manos de las fuerzas de ocupación, admitió David Cameron, primer ministro de Gran Brataña, con lo que se retractó de la primera versión oficial de su gobierno acerca de que la activista Linda Norgrove fue víctima de sus captores.

Norgrove, quien trabajaba para un grupo estadunidense de ayuda, fue secuestrada el 26 de septiembre junto a tres compañeros afganos cuando visitaban un área aislada de la provincia de Kunar.

La Oficina británica de Asuntos Exteriores indicó el sábado que la mujer fue asesinada por sus captores durante un fallido intento de rescate.

Cameron declaró este luens que el general David Petraeus, comandante de las fuerzas estadunidenses y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Afganistán, informó que una revisión de los hechos reveló evidencia que indica que Norgrove tal vez no falleció a manos de sus secuestradores.

Esa evidencia, y las posteriores entrevistas con el personal que participó, sugieren que Linda pudo haber muerto como resultado de una granada detonada por las fuerzas de combate durante el asalto estadunidense, señaló Cameron en conferencia de prensa en su oficina de Downing Street, pero aclaró que no hay certidumbre de esto, por lo que se lanzará una investigación más completa entre Estados Unidos y Gran Bretaña.

El primer ministro asumió la responsabilidad por autorizar la operación de rescate de la trabajadora humanitaria; no obstante, calificó de correcta la forma en que actuaron las fuerzas estadunidenses. Sabíamos que la vida de Linda estaba en grave peligro y que la operación ofrecía la mejor oportunidad para salvar su vida, dijo, y añadió: debemos recordar que, al final, la responsabilidad por la muerte de Linda es de quienes la secuestraron.

El ejército estadunidense en Kabul confirmó que Petraeus ordenó una investigación sobre la muerte de Norgrove, escocesa de 36 años.

Mientras, el presidente afgano, Hamid Karzai, señaló en entrevista con CNN que mantiene contactos no oficiales con el grupo radical islámico talibán desde hace algún tiempo, con el objetivo de impulsar un proceso de paz en el país.

Hablamos con los talibanes, de compatriota a compatriota, expresó.

El jueves, Karzai anunció la creación de un Alto Consejo para la Paz en Afganistán, con el liderazgo del ex presidente Burhanuddin Rabbani.