La senadora por la región de Atacama, Isabel Allende, hija menor del fallecido y depuesto ex presidente Salvador Allende, hizo ayer un llamado a no abandonar a los mineros rescatados de la mina San José ni a sus compañeros de la empresa San Esteban. Los empresarios, aseveró, deben tener más conciencia social y respeto por sus trabajadores.

También resaltó la tremenda incertidumbre en que se encuentran los 345 mineros chilenos que hoy carecen de trabajo.

De acuerdo con un editorial de la página de Internet diariolibre.com, mientras en 1971 en Chile, la participación de las empresas estatales en la producción de la gran minería era de 88 por ciento; en 2001 apenas llegaba a 31 por ciento. En 2006, las empresas trasnacionales recuperaron el doble de toda la inversión realizada desde 1974, enviando como ganancias al exterior 25 mil millones de dólares, equivalentes a 75 por ciento de todo el presupuesto de Chile.

“A pesar de esto, recortan costos de producción y echan mano de empleados contratistas y subcontratistas que cobran hasta 25 por ciento del salario de los tradicionales .

“Atrás quedaron los principios establecidos en la reforma constitucional del 11 de julio de 1971, impulsada por el gobierno de Salvador Allende, que instauró la soberanía y la solidaridad nacional, como principios rectores de la minería chilena. Esos postulados fueron barridos en 1973 por el golpe de Estado y las políticas de liberalización –simbolizadas en la Ley Orgánica Constitucional de Concesiones Mineras– que terminaron poniendo en todas las industrias estratégicas, la ventaja de la ganancia de contubernios privados por sobre lo social”, agregó diariolibre.com.