La Secretaría de Gobernación (SG) y la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) han fungido en las semanas recientes sólo como mediadores entre los diversos grupos que se disputan el control del Sindicato Mexicano de Electricistas, particularmente para definir la forma en que se repondrá el proceso electoral y se accedería a los recursos de esta organización.

La JFCA informó al grupo encabezado por Martín Esparza acerca de la propuesta de su opositor Alejandro Muñoz, quien plantea que sólo voten los jubilados y que sea este tribunal laboral el que organice la elección.

Por otra parte, según el planteamiento entregado a Esparza a través de la JFCA, que mientras ocurre el nuevo proceso electoral y se define a los integrantes del comité central, los líderes actuales deberían abandonar los inmuebles sindicales.

Esta propuesta fue sometida a la consideración de la asamblea el miércoles, donde concurren principalmente electricistas que no han aceptado su liquidación, esto es, quienes permanecen en el grupo identificado como de resistencia, opositores al decreto de extinción. El plan fue rechazado por Esparza y sus seguidores, quienes consideran que sale completamente de lo que indican los estatutos sindicales, en el sentido de que aquellos ex trabajadores de LFC que ya cobraron su liquidación no tienen derecho a votar porque esa determinación los convirtió en miembros del SME en receso. En cambio, quienes no han aceptado su finiquito (alrededor de 16 mil 300) sí pueden votar. De acuerdo con electricistas consultados, el planteamiento hecho llegar al SME por la JFCA debe ser rechazado por completo.

En tanto, un sector de trabajadores considera que el titular de Gobernación, Francisco Blake, no ha cumplido con su palabra porque –aseguran– el sindicato levantó la huelga de hambre colectiva (que mantuvieron más de 90 días en el Zócalo capitalino) a cambio de una solución al conflicto derivado de la extinción de Luz y Fuerza del Centro, incluida la toma de nota (reconocimiento oficial a Esparza y los otros 25 integrantes del comité central).

Por ello, no descartan emprender un nuevo plan de acción más contundente en el que se considera realizar manifestaciones en Gobernación.

En este contexto, este viernes está programada, en Bucareli, una nueva reunión privada entre dirigentes sindicales encabezados por Esparza con funcionarios de la SG.