La imposición de un estereotipo físico delgado como sinónimo de éxito social y económico, favorece la dictadura del cuerpo que en los adolescentes puede tener un impacto demoledor, aseguró Olga Bustos Romero, catedrática de la Facultad de Sicología de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Experta en el análisis de medios de comunicación y perspectiva de género, afirmó que los miles de mensajes que reciben niños y adolescentes diariamente al estar frente al televisor, en las revistas de moda e incluso en Internet, alimenta una preocupación excesiva por su peso, pues ser gordo es sinónimo de fracaso.

Agregó que es común que en las historias que ven por televisión o siguen en las revistas de moda, la protagonista siempre es delgada. La publicidad, en la mayoría de medios impresos, y en particular aquellos dirigidos a las adolescentes, presenta una imagen del cuerpo femenino siempre delgado, como un ideal de belleza y éxito social. Esto favorece el deseo de alcanzar figuras corporales ajenas a la realidad.

Bustos Romero destacó que en investigaciones recientes sobre los mensajes publicitarios difundidos en revistas de moda, detectamos que ciento por ciento utiliza modelos delgadas o hiperdelgadas para anunciar sus productos. Esto alienta una modificación de los estereotipos sociales y favorece la creación de falsos imaginarios sobre la importancia de estar delgado.

A ello se suma, indicó, que en estudios recientes con alumnas de bachillerato en el Distrito Federal, encontramos que alrededor de 60 por ciento no está de acuerdo con su figura corporal y 45 por ciento se interesa por estar más delgadas, aún cuando tienen un peso y talla adecuados para su edad.