La declaración de Salvador Carmona, de que en la Federación Mexicana de Futbol sabían que había dado positivo en un control antidopaje y aún así le ordenaron jugar contra Brasil en la Copa Confederaciones de 2005, entristece a Gonzalo Pineda, mediocampista de Cruz Azul, porque la ya de por sí manchada imagen del futbol mexicano se mancha más y se reviven viejos errores.

Aunque el jugador celeste integró esa selección, añadió que iba como compañero de Carmona y nada más. Desconozco muchísimas cosas que pasaron a nivel directivo y de otras personas.

Aseguró que se enteró del dopaje de Carmona y Aarón Galindo “hasta que se desencadenó todo. Nadie estaba enterado. Teníamos un gran nivel y solamente pensábamos en jugar futbol y en el partido contra la verdeamarelha”.

“Fue lamentable –continuó– porque se estaba haciendo un gran torneo, se le acababa de ganar a Brasil, pero nuestro balompié se caracteriza por eso; cuando las cosas van bien, siempre pasa algo que mancha nuestra imagen.”

En la conferencia de prensa de ayer en La Noria se le preguntó si extrañó el manejo que dieron los directivos al caso, y respondió: Sí, pero en aquel entonces yo era muy joven, iba comenzando y no sabía muchos manejos en el aspecto directivo.

Sobre lo que la víspera señaló el argentino Marcelo Bielsa, de que el draft en nuestro país es la exaltación de lo peor en el futbol, Pineda dijo que a todos los jugadores nos molesta, nos parece denigrante. Lo saben los directivos, pero no hacen nada porque para ellos es lo más conveniente.

Alentó la esperanza de que algún día los futbolistas puedan unirse para erradicarlo, porque no me parece que en México existan ese tipo de situaciones.