Argel, 9 de noviembre. El asalto de las fuerzas marroquíes a un campamento de saharauis que demandan mejores condiciones de vida en Sáhara Occidental causó la muerte a 11 refugiados y dejó 723 heridos y 159 detenidos por la policía de Marruecos, que continúan desaparecidos, según el primer balance del Frente Polisario, 24 horas después de la incursión de los contingentes armados.

La heroica población de El Aaiún enterró a sus mártires, cuya cifra se eleva ahora a 11 personas, destacó en un comunicado el Polisario, que desde 1976 reclama la independencia de la República Democrática Árabe Saharaui.

La agencia oficial de noticias marroquí informó que en El Aaiún –considerada por el Estado marroquí la capital de la provincia del Sáhara Occidental– se restableció la calma y citó fuentes de las fuerzas de seguridad que informaron de la detención de 65 saharahuis por resistir el arresto.

El Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) acordó solicitar a Ban Ki-moon la elaboración de un informe sobre los hechos para analizarlos y emitir un pronunciamiento.

La decisión fue adoptada después de que la representación de México –actual miembro no permanente del órgano ejecutivo de la ONU– propuso discutir el asunto a las cinco misiones permanentes –China, Rusia, Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña– y a otras nueve delegaciones que ocupan temporalmente un sitio.

Al concluir hoy la ronda de pláticas informales en Nueva York, el Polisario y Marruecos decidieron realizar dos reuniones de consultas en diciembre y enero.

Convocados por el enviado especial de la ONU al Sáhara, el experimentado negociador diplomático Christopher Ross, y con observadores de los gobiernos de Argelia y Mauritania, las partes alcanzaron hoy acuerdos en favor de las familias separadas por el conflicto, residentes en la provincia de Tindouf, para que sin retraso puedan viajar por vía aérea a Sáhara Occidental y posteriormente por rutas terrestres.