Apresurado, cuando ya salía de la conferencia de prensa, el técnico de Pumas, Guillermo Vázquez, escuchó la última pregunta de qué se siente ganarle al América, y su respuesta fue espontánea: ¡Bien chido!

El novel timonel no dudó en aceptar que el partido del domingo será el más importante de su carrera, por el rival y la trascendencia y, ante el hecho de ser el último estratega universitario en vencer a las Águilas en el Azteca, aclaró que eso me dio mucha alegría, pero ahora es otro momento y debe vivirse el presente.

A Vázquez le parece normal que sus jugadores hablen de odio y de despellejar a los americanistas, pero aclaró que deberán demostrarlo en la cancha.

Aquí tienen libertad de expresión y tal vez han hablado de más y a lo mejor han faltado el respeto. Me agrada que los jóvenes tengan ese deseo, pero la realidad está en el terreno de juego: que lo demuestren ahí me gustaría más, señaló.

Aclaró que ha enfrentado muchas veces al club de Coapa, pero yo no odio a nadie y lo único que buscamos demostrar es que somos mejores.

Para Memo es benéfico que el rival ante el que se jugarán el pase a la liguilla sea el América, porque eso implica que sus pupilos estarán muy concentrados en los aspectos técnico, táctico, físico y mental por todo lo que representa enfrentar a su máximo adversario.

En otro tema, dijo desconocer la versión de que Sergio Bernal y Francisco Palencia estén viviendo sus últimos partidos con la playera auriazul.

No sé de dónde salió eso. Como grupo estamos muy unidos hasta que esto termine y luego se hará un examen general. Los dos son muy profesionales, como pocos, y jueguen o no, ayudan ciento por ciento al equipo, lo que es muy importante, observó.

Por su parte, Leandro Augusto resaltó que Pumas en el Azteca se siente como si estuviera en casa por el gran número de sus aficionados que acuden, lo cual es muy importante y nos motiva mucho.

El mediocampista, al igual que su técnico, se mostró mesurado ante las declaraciones de sus compañeros: Lo que se ha dicho queda de lado y todo se arreglará dentro de la cancha.

No obstante, admitió que no hay mañana y que no deben caer en la desesperación porque su rival tiene jugadores de mucha calidad.

“Se trata del partido más importante porque es el último, porque de por medio va el orgullo y porque nada más el triunfo nos da esperanzas de ir a la liguilla. Por eso debemos ser un equipo entregado y con orden, como ante Necaxa.

En los números el América está mejor, pero el partido será bastante parejo porque en los clásicos es difícil hablar de favoritos, precisó.

Leandro también señaló que tendrán la ventaja de saber el domingo por la tarde qué marcador les da el pase a la siguiente ronda, ya que conocerán los resultados de todos los encuentros y su rival directo, Pachuca, juega este viernes.