A seis meses del secuestro del ex senador panista Diego Fernández de Cevallos, sus hermanos e hijos disminuyeron sus apariciones públicas en la entidad, mientras que en el rancho La Cabaña los trabajadores están a la espera de que el ex candidato presidencial llegue a casa.

Presuntamente, la familia del litigante y ex senador panista pagó 50 millones de pesos por su liberación; sin embargo la privación ilegal de la libertad a la que fue sometido desde el 14 de mayo de este año continúa, y las autoridades federales mantienen suspendidas las investigaciones del caso.

Al respecto, las autoridades de Querétaro prefieren guardar silencio sobre el secuestro. Ayer, el gobernador, el priísta José Calzada Rovirosa, dijo: De vez en cuando platico con los hijos (del político panista), pero no tengo ninguna información.

Desde que la Procuraduría de Justicia del Estado cedió las investigaciones a la Procuraduría General de la República (PGR), el titular de aquella corporación, Arsenio Durán Becerra, ha dicho que no tiene mayor información porque el caso no es de su competencia, y la indagatoria por parte del Ministerio Público Federal se suspendieron siete días después de ocurrido el plagio.

En el rancho La Cabaña, propiedad de Fernández de Cevallos que se localiza en el municipio de Pedro Escobedo, y sitio en el que fue privado de su libertad, era común observar a algunos hermanos del litigante reunidos allí o conviviendo con políticos o empresarios en restaurantes ubicados sobre la avenida Juárez de la cabecera municipal de San Juan del Río (el segundo municipio más poblado del estado).

Tras el secuestro del también ex candidato a la Presidencia de la República en 1994, sus familiares también disminuyeron su presencia en uno de los restaurantes a los que constantemente acudían, indicó uno de los meseros del lugar.

Ramón Fernández de Cevallos, hermano de Diego, desde hace dos meses no acude al café que acostumbraba.

El 23 de agosto, durante el partido de futbol entre los equipos Gallos Blancos de Querétaro y América fue visto Rodrigo Fernández de Cevallos, hijo mayor del secuestrado, quien fue fotografiado junto al presidente municipal de Querétaro, el panista Francisco Domínguez Servién.

A otros hijos que habitan algunos de los ranchos que tiene el ex candidato presidencial en comunidades de esa demarcación municipal y de Pedro Escobedo tampoco se les ha visto.

En las propiedades, los trabajadores están a la espera del arribo del ex senador ante la especulación de que los familiares del político ya pagaron el rescate.

Alfonso Landeros Tejeida, presidente municipal de Pedro Escobedo, aseguró recientemente que el ex senador regresaría a su casa los primeros días de noviembre.

Eso es lo que ellos (los trabajadores) comentan en (el municipio de Pedro) Escobedo; el rumor, el comentario, es que no se vendió nada y que finalmente el licenciado Diego Fernández pudiera estar nuevamente en noviembre con su familia y en su casa.

Este sábado en el rancho La Cabaña, en Pedro Escobedo, donde fue secuestrado Diego Fernández, no hubo mayor actividad.

Según versiones periodísticas Diego Fernández podría ser liberado en los primeros días de noviembre, sin embargo, sus familiares nunca confirmaron haber llegado a un acuerdo con los plagiarios, como tampoco el monto que hubieran cubierto para su liberación.