El caos en la CFE se aprovecha para hacer cobro doble mensual, entre otras anomalías
El frente de consumidores suma nuevas organizaciones del estado de México, Puebla y DF
Lunes 15 de noviembre de 2010, p. 14
Cerca de 4 millones de usuarios del servicio de energía eléctrica de la zona centro del país que atendía Luz y Fuerza del Centro (LFC) están en riesgo de perder el subsidio que otorga el gobierno federal a este servicio, porque la Comisión Federal de Electricidad (CFE) no lo está aplicando: plantea cobros dobles a los usuarios, incrementa el costo a quienes instala nuevos medidores y realiza cobros estimados
y no reales.
A decir del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), esta paraestatal está borrando
o “desdibujando el pago diferenciado de tarifas que aplicaba LFC, alertó el gremio que en esta semana sumó más organizaciones al Frente de Consumidores del Servicio de Energía Eléctrica.
Indicó que a este nuevo frente se han unido organizaciones de usuarios del estado de México, Puebla y el Distrito Federal, entre otros, las cuales agrupan a consumidores del servicio de energía eléctrica, agrupaciones civiles y sociales, gran parte de las cuales se han amparado contra el cobro indiscriminado del servicio.
Fernando Amezcua, secretario del interior del SME, destacó que la CFE está acabando con el subsidio que tenía establecido el gobierno federal a los usuarios.
Según explicó, LFC tenía fijado el siguiente tarifario: para quienes consumían de uno a 75 kilovatios-hora al mes, pagaban 79 centavos cada kilovatio-hora; los siguientes 100 kilovatios se les cobraban a un peso con 16 centavos, y el resto a dos pesos con 46 centavos.
No obstante el descontrol absoluto que priva ahora en la empresa sobre los consumos, se aprovecha para hacer cobros dobles en los recibos sin descontar el pago anterior que corresponde al subsidio; se están emitiendo recibos por mes, no por bimestre, y a quienes se les instala el medidor de prepago les promedian
el costo del servicio y se cobra parejo el consumo a un peso con 44 centavos desde el primer kilovatio. Ya no hay ni costo bajo ni más subsidios, además de que el usuario debe pagar el medidor, cuyo costo se eleva, en promedio, en 90 o 100 por ciento.
Amezcua sostuvo que los 44 mil millones de pesos, que, según se dijo, eran transferidos anualmente a LFC, en realidad correspondían al subsidio de los usuarios, el cual ahora se quiere desaparecer
.
Respecto del monedero electrónico, comentó que el costo del kilovatio para hacer efectivos los puntos
que ofrece es aún más caro, su equivalencia será 300 por ciento más caro que el promedio.