Los ejidatarios de San Sebastián Bachajón (municipio de Chilón, Chiapas), adherentes de la otra campaña, denunciaron una creciente estrategia de calumnias, injusticias y provocaciones de las autoridades del mal gobierno desde hace cinco meses, así como un recrudecimiento de agresiones y hostigamientos por parte de miembros de la Organización para la Defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos (Opddic), considerada paramilitar por los propios ejidatarios.

Los de Opddic, grupo oficialista, quieren desintegrar la sociedad y la organización, intimidando con que quieren tomar la caseta de cobro y el banco de grava, recuperado éste por los ejidatarios recientemente. Ahora surgen nuevas amenazas con el mismo interés del neoliberalismo y los proyectos trasnacionales. Ante ello, la sociedad civil cada vez más se está organizando para resistir y defender los recursos naturales de nuestros ejidos.

Los campesinos tzeltales, vecinos del balneario Agua Azul, señalaron que el comisariado ejidal oficialista no ha podido ganarse la confianza de la gente ni ha tenido idea de la política que está haciendo. Responsabilizan de ello al delegado de Gobierno en Chilón, Ledín Méndez; a la diputada Yari del Carmen Gebrardt Garduza, y a los indígenas Carmen Aguilar Gómez y su hijo, conjuntamente con Francisco Guzmán Jiménez. Todas estas personas han estado reuniéndose en Chilón, Ocosingo y otras partes con dirigentes de la Opddic, según para despojar la caseta de cobro y el banco de grava.

Los ejidatarios aseguran que estos ambiciosos se han ganado la confianza del secretario de Gobierno, Noé Castañón, quien los recibió el pasado día 8 de noviembre, con las puertas abiertas y la mesa puesta con un menú especial, ideas y proyectos trasnacionales y cómo destruir nuestra organización. Sostienen que claramente se ve el interés de iniciar un conflicto en diferentes comunidades del ejido, organizando grupos paramilitares para intimidar a la sociedad.

Los ejidatarios advierten: Vamos a defender nuestros recursos naturales hasta las últimas consecuencias, le vamos a demostrar al gobierno que no estamos solos. De cualquier agresión a nuestros compañeros culpamos directamente al gobierno de Juan Sabines Guerrero, al delegado de Gobierno, a la diputada Gebrardt Garduza (con sede en Palenque) y a la dirigencia de la Opddic.

Anuncian que a partir de esta fecha no habrá diálogo ni acercamiento con ninguna autoridad oficial, ya que no negociamos ni hacemos ningún trato con el mal gobierno, pues claramente se ve su interés en despojarnos de nuestras tierras y apoderarse de nuestros recursos.