Kabul, 20 de noviembre. La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) admitió hoy que sus fuerzas mataron accidentalmente a tres civiles afganos tras verse atacados por insurgentes en la provincia oriental de Kunar.

Las fuerzas de ocupación respondieron con fuego de mortero, informó la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad de la alianza en un comunicado.

El incidente se produce un día después de que casi 30 agencias de ayuda internacionales llamaron a los líderes de la OTAN a hacer más para proteger a los civiles afganos durante sus operaciones contra los rebeldes talibanes.

Otros cuatro civiles murieron y al menos 30 resultaron heridos hoy en dos ataques suicidas en menos de una hora en el este afgano, informaron las autoridades.

Una mujer, un niño y un anciano murieron y 25 resultaron heridos cuando un hombre en bicicleta se hizo volar por los aires frente al edificio del gobierno en Metarlam, capital provincial de Laghman, informó el Ministerio del Interior en un comunicado.

Otro civil murió y ocho resultaron heridos una hora después cuando otro suicida detonó sus explosivos en el centro de la ciudad, añadió. Los talibanes asumieron la responsabilidad de los ataques y aseguraron que cinco agentes de inteligencia y nueve soldados afganos perdieron la vida, lo que negaron fuentes oficiales.

Por otro lado, en el vecino Pakistán, presuntos talibanes incendiaron una decena de camiones cisterna que transportaban combustible para las tropas de la OTAN desplegadas en Afganistán.

Hombres armados atacaron un taller donde estaban estacionados los camiones, y tras vencer la resistencia de los guardias que custodiaban el lugar, prendieron fuego a 10 de los vehículos.

Según los reportes, el ataque tuvo lugar en las afueras de Peshawar, la principal ciudad de la provincia de Khyber-Pakhtunkhwa, en el noroeste de Pakistán.

Hasta el cierre de esta edición ningún grupo reivindicó el ataque, pero se presume que fue realizado por Tehrik-e-Taliban Pakistan, agrupación acusada por las autoridades de tener vínculos con los rebeldes afganos y Al Qaeda.