La reforma presidencial por la que se pretende facultar al titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a disponer de todo el personal de la dependencia para destinarlo al combate al crimen organizado quedará pendiente hasta el próximo periodo de sesiones, ya que además de que no hay tiempo para procesar la iniciativa, ésta provocó rechazo entre las principales fuerzas políticas en el Senado.

No vamos a dejar un Estado policiaco fascista para siempre. El Ejecutivo no puede seguir pidiéndonos que le robemos pedazos de libertad a los ciudadanos, recalcó el senador del PRI Francisco Arroyo Vieyra.

Dijo que aunque desde la Presidencia de la República se vuelva a orquestar una campaña feroz contra los priístas y se les acuse de no colaborar en la batalla contra la inseguridad, no van a legislar a tontas y a locas, ni a aprobar que se militarice aún más el país.

Agregó que aunque la leva está institucionalizada, dentro de las fuerzas armadas no gusta.

Igualmente el senador del PAN por Chihuahua Ramón Galindo dijo que deben ser muy cuidadosos y analizar en detalle esa iniciativa presidencial, de manera que no vayamos a generar un monstruo que luego no podamos controlar.

Por separado, el coordinador del PRD, Carlos Navarrete, comentó que la iniciativa los tomó por sorpresa, pues no hubo cabildeo alguno del secretario de la Defensa, Guillermo Galván. No sé de donde se derive, por eso tenemos que verla con todo detenimiento.

Dijo que el general Galván deberá comparecer ante comisiones para explicar los alcances de esa iniciativa, qué se pretende con ella, y que precise el número de profesionistas que se quiere trasladar a la lucha contra el narcotráfico.