Barcelona, 28 de noviembre. El Barcelona y el Real Madrid se enfrentan este lunes en el Camp Nou en el clásico español más igualado de los recientes años, en el que ambos gigantes se juegan el liderato liguero que actualmente ocupan los blancos con un punto de ventaja sobre los azulgranas.

El Real Madrid fue recibido con una inusitada expectación en el aeropuerto de El Prat, con cerca de dos mil personas vitoreando su llegada.

Sin embargo, cuando arribaban al hotel Juan Carlos I el calor y el entusiasmo se tornó en malos modos, escasa seguridad y pedrada al autobus por un grupo de radicales. Se rompió una luna al lado de los asientos que ocupaban Albiol y Arbeloa, y un miembro de la seguridad del Madrid sufrió también una pedrada en la espalda y en la cabeza.

No hubo que lamentar más daños personales. Los jugadores pudieron acceder a sus habitaciones del hotel sin ninguna otra incidencia.

A este (clásico) sí se llega muy igualado. Tanto Barça como Madrid están en un buen momento, con confianza y pocas lesiones. Jugando en casa se puede pensar que tenemos cierta ventaja, pero pienso que está al 50 por ciento, adelantó el central azulgrana Carles Puyol.

Se enfrentarán el refinado estilo de toque y mimo del balón del entrenador Pep Guardiola, y el juego directo, vertical y de pegada de su rival merengue, el portugués José Mourinho, quien acude a Barcelona con ganas de revancha.

Mala racha merengue

No firmo el empate, sólo pienso en la victoria. En el Madrid tenemos el triunfo metido en la cabeza. Aquí sólo vale ganar, afirmó Iker Casillas, portero y capitán de los merengues, quienes han perdido los recientes cuatro duelos con los blaugranas.

Por lo que respecta a los técnicos de ambos equipos, Guardiola señaló: No tengo nada que esconder a Mourinho, ya que el Real Madrid es un rival espectacular, potente, rígido, con muy buenos jugadores y muy bien organizado.

El técnico portugués aclaró que el duelo en el Camp Nou será muy importante para el desarrollo del campeonato español, pero no decisivo, como sí lo podría ser un duelo de eliminatorias de Liga de Campeones.

En este partido nadie se va a casa a llorar si pierde. Nadie va a casa con una competición perdida. No es un encuentro que decida, aseguró.

Asimismo, se verá un duelo entre Lionel Messi, del Barça, y Cristiano Ronaldo, del Real.