Censuran Bolivia y Venezuela el divisionismo que promueve Washington en la zona
Domingo 5 de diciembre de 2010, p. 6
Mar del Plata, 4 de diciembre. Los ecos del escándalo por las filtraciones a la prensa de secretos de la diplomacia estadunidense vía Wikileaks resonaron este sábado en la Cumbre Iberoamericana, que culminó en este balneario argentino, por las duras críticas que lanzaron Bolivia, Venezuela y Cuba.
A pesar de que no hubo consenso para manifestar una postura común en la batería de documentos finales de los gobiernos de América Latina, España y Portugal, el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, declaró en el plenario en Mar del Plata que se trata de una diplomacia imperial
.
No permitamos que estas informaciones nos dividan. Este espionaje de intrigas no puede limitar la tarea que emprendió América Latina
, señaló García Linera en el salón Américas del hotel Provincial, en ausencia del mandatario Evo Morales.
Entre las revelaciones de decenas de miles de cables secretos se indicó que la ahora mandataria argentina, Cristina Fernández, aceptó durante el gobierno del republicano George W. Bush, cooperar para moderar a Morales y acercarlo a Washington.
Pero también los cables plantearon sospechas sobre la salud mental de Fernández de Kirchner y sobre una supuesta enfermedad grave de Morales.
El canciller venezolano, Nicolás Maduro, también en ausencia del presidente, Hugo Chávez, dijo que “recientemente se ha reconocido una inmensa operación de intriga política, de espionaje en busca de influencia por vía ilegítima y violación de derechos soberanos de los estados.
Esto demuestra la persecución permanente contra la revolución bolivariana. Manifestamos el más profundo repudio a todas las operaciones para dividir y socavar la unión de nuestros líderes y nuestros pueblos
, dijo Maduro.
Abogó por la defensa de los valores democráticos, de respeto
, y aseguró que en la diversidad está la fortaleza real de nuestros países. Por eso ratificamos nuestro más profundo repudio a las operaciones que está haciendo Estados Unidos para socavar a nuestros líderes, a nuestros gobiernos
, manifestó.
Los cables filtrados a la prensa también dan cuenta de una supuesta entrega de bonos económicos de Venezuela a jefes militares bolivianos en 2008, y otros muestran el interés de México por obtener apoyo de Brasil para mermar la influencia de Venezuela en la región.
Bruno Rodríguez, el canciller cubano, en lugar de otro ausente, el presidente Raúl Castro, dijo que las escandalosas revelaciones transparentan sus verdaderas intenciones (de Estados Unidos) que son la intromisión en los asuntos
de Latinoamérica.
Momentos antes, el secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, intentó bajar el tono a posibles conflictos en la región tras las revelaciones de Wikileaks y aseguró que su principal preocupación es que los países mejoren la información que tienen unos sobre otros
.
No hay que basarse en percepciones equivocadas
, declaró el chileno a la prensa.