Rodríguez Llerena purgará 30 años de cárcel por poner una bomba en un hotel en 1997
Martes 7 de diciembre de 2010, p. 22
La Habana, 6 de diciembre. El Tribunal Supremo Popular (TSP) conmutó una segunda pena de muerte, esta vez la que tenía el salvadoreño Otto René Rodríguez Llerena, quien hoy recibió una sentencia de 30 años de cárcel por la colocación de un artefacto explosivo en un hotel de La Habana en 1997.
El viernes pasado el mismo tribunal había conmutado la pena capital por 30 años de prisión en el caso de Raúl Ernesto Cruz León, quien el mismo año puso bombas en un restaurante y cinco hoteles de la capital cubana, en uno de los cuales murió el italiano Fabio di Celmo.
Ambas decisiones ratifican la vigencia en Cuba de una virtual moratoria de la pena de muerte desde hace siete años.
Igual que Cruz León, Rodríguez Llerena fue hallado culpable del delito de terrorismo continuado. La Sala de Delitos contra la Seguridad del Estado del TSP sesionó este lunes, según reportó el sitio Cubadebate.
Después de ese fallo, es posible que en Cuba sólo quede un condenado a muerte: Humberto Eladio Real Suárez, un cubano que vino a la isla en 1994 en forma clandestina, en una incursión armada, procedente de Estados Unidos.
Real desembarcó en la costa norcentral de la isla, cerca del poblado pesquero de Caibarién, y en la incursión mató al pescador Arcelio Rodríguez García.
El presidente Raúl Castro anunció en 2008 la conmutación de casi todas las penas de muerte pendientes entonces de ejecución, y que medios opositores calculaban en cerca de 50. Sin citar sus nombres, el mandatario también anticipó que se revisarían los casos de Cruz León, Rodríguez Llerena y Real Suárez.
Rodríguez Llerena puso el explosivo debajo de una butaca en el vestíbulo del hotel Meliá Cohiba, el 3 de agosto de 1997. La bomba estalló al día siguiente y causó daños materiales, pero no víctimas.
Ambos salvadoreños reconocieron en el juicio que fueron contratados para ejecutar los atentados por cuenta de quien ahora saben que es Luis Posada Carriles, originario de la isla y nacionalizado venezolano, quien en 1976 fue el autor intelectual del sabotaje a un avión civil cubano en el que murieron sus 73 ocupantes.
La justicia de Estados Unidos le sigue proceso a Posada, por haber entrado en forma irregular a ese país y por haber mentido a las autoridadades migratorias acerca de su participación en los atentados en Cuba en 1997.
Venezuela reclama la extradición de Posada por el caso del avión cubano.