Londres, 6 de diciembre. La defensa del fundador del sitio de Internet Wikileaks, Julian Assange, organiza una reunión con Scotland Yard para que su cliente se entreviste con la policía británica, la cual recibió hoy una nueva orden de captura contra el australiano, de 39 años, por la presunta comisión del delito de abuso sexual, por el que lo busca la justicia sueca.

En la tarde recibí una llamada de la policía para decirme que habían recibido la demanda de extradición de Suecia, declaró el abogado británico Mark Stephens a la BBC.

La petición es entrevistar a Julian Assange. No ha sido acusado de nada, agregó.

Tomamos disposiciones para reunirnos con la policía voluntariamente, con el fin de facilitar el interrogatorio que necesitan, apuntó sin precisar cuándo podría llevarse a cabo el encuentro.

El abogado señaló que éste será en Gran Bretaña, aunque se negó a confirmar si Julian Assange sigue en Reino Unido.

La BBC informó horas antes que la policía británica recibió la nueva orden internacional de captura emitida por Suecia.

La directora de la fiscalía, Marianne Ny, ha provisto a la policía británica de la información adicional que fue requerida. El asunto se está tratando con las autoridades judiciales competentes, como se define en la Ley Europea de Detención, expresó la fiscalía británica en un comunicado.

Cuando la corporación logre ubicarlo, Assange tendrá 24 horas para comparecer ante los jueces.

Suecia emitió el viernes la nueva orden de arresto contra Assange –quien podría estar en Gran Bretaña–, la cual fue integrada con los elementos exigidos por la policía británica.

El 18 de noviembre la justicia sueca emitió una orden de aprehensión contra el australiano, con el objetivo de interrogarlo por sospechas razonables de violación, agresión sexual y coerción, en un caso que se remonta a agosto pasado.

Por lo pronto, el procurador de Justicia de Australia, Robert McClelland, declaró que Assange tiene el derecho de regresar a su país natal y recibir ayuda consular. Explicó que si es detenido en otra nación se le apoyará consularmente, pero Australia no se negará a colaborar en cualquier investigación penal, sobre todo en Estados Unidos.

Julian Assange, momentos antes de una conferencia de prensa en noviembre pasado, en la ciudad de GinebraFoto Reuters

Por su parte, el procurador general estadunidense, Eric Holder, declaró que el gobierno del presidente Barack Obama considera usar todo el peso de la ley, en particular la Ley de Espionaje, para procesar a Assange por revelar los documentos secretos del Departamento de Estado.

Aunque Assange es ciudadano australiano, expertos legales estiman que existe la posibilidad de llevarlo a juicio en Estados Unidos. En algunos países es fácil procesar a personas por difundir datos clasificados.

Sin embargo, especialistas destacaron que Assange y Wikileaks podrían declararse organización de noticias, y con ello estarían protegidos por la primera enmienda de la Constitución de Estados Unidos.

Mientras, el cerco contra Wikileaks crece. Este lunes el banco suizo Postfinance dijo haber cerrado la cuenta de Assange, debido a datos falsos sobre su domicilio.

Según la institución de crédito, el fundador de Wikileaks afirmó estar domiciliado en Ginebra, lo que resultó ser falso durante el examen de los datos. Por tal motivo, como Assange no puede probar su residencia en Suiza, no cumple la condición requerida para mantener relaciones comerciales.

Según Postfinance, ahora intentará contactar a Julian Assange para saber adónde desea que le transfieran los fondos. De no conseguirlo, abundó, éstos serán enviados a una cuenta que estará bloqueada, hasta que alguien acreditado los reclame.

El pasado fin de semana el portal de pagos por Internet Paypal canceló la cuenta para transferencias de Wikileaks por una infracción a las condiciones de uso, comunicó la empresa, propiedad de la tienda de subastas virtuales eBay.