Martes 14 de diciembre de 2010, p. 33
Los michoacanos radicados en Estados Unidos tienen miedo de regresar a sus comunidades de origen por el persistente acecho de bandas criminales, dijeron líderes de migrantes de Texas y California. Autoridades estatales confirmaron que desde 2009 el número de migrantes vacacionistas ha ido a la baja.
Florania Boyza Prado, vicepresidenta de la Federación de Clubes Michoacanos en Texas, dijo que en ese estado hay un alto consumo de drogas, pero lo que asombra es la horrible situación
de Michoacán, cuyos residentes piden a sus familiares no visitarlos.
También de visita en Morelia, el presidente de las Federaciones de Clubes y Asociaciones de Michoacanos en California, Ramiro Romero Ramos, dijo que para los paisanos es muy desafortunado ver la ola de violencia y muchos ya no quieren ir con sus familias por temor a ser víctimas de la delincuencia.
La secretaria del Migrante del gobierno de Michoacán, Zaira Mandujano Fernández, confirmó que hace un año arribaron 61 mil paisanos a las fiestas decembrinas y ahora se esperan 48 mil, cuando el promedio era de 80 mil; aunque habrá una previsible recuperación en la medida que se inhiba el crimen organizado.
Los paisanos también son víctimas de bandas que acechan a sus caravanas en las carreteras de Sinaloa. Algunas usan vehículos con placas de Estados Unidos para atraer a los viajeros y asaltarlos, advirtió el diputado federal panista Adolfo Rojo Montoya, ex delegado del Instituto Nacional de Migración.
El también integrante de la Comisión de Transporte de la Cámara de Diputados dijo que por ahora sólo puede alertarse a los viajeros para que tomen precauciones y, en caso de emergencia, pidan ayuda en las casetas de cobro.