Con el propósito de estabilizar el precio de la tortilla y garantizar la permanencia de más de 5 mil microindustriales, el Gobierno del Distrito Federal pondrá en marcha un sistema de franquicias para este sector que atenderá en un principio a 10 tortillerías por delegación, con una inversión aproximada de 40 millones de pesos, que servirán para la adquisición de maquinaria, capacitación y asistencia financiera.

No se trata de un apoyo a fondo perdido, sino de proveer un amplio rango de servicios, que incluyan entrenamiento, suministro de productos y planes de marketing, a fin de consolidar su actividad productiva, mantener las más de 30 mil fuentes de empleo que generan y evitar que sean absorbidas por las grandes firmas trasnacionales, explicó la secretaria de Desarrollo Económico, Laura Velázquez Alzúa.

Independientemente de que el gobierno capitalino trabaja en la posibilidad de fungir como aval en la compra de maíz a productores nacionales y “no estar cada año ante un nuevo tortillazo”, cuando este sector, junto con las micro y pequeñas industrias panificadoras y de la rama química forman parte de un programa de reindustrialización, al representar 70 por ciento del sector manufacturero de la ciudad.

La funcionaria explicó en entrevista que el proyecto a implementarse con los industriales de la tortilla será un ejemplo a seguir, al dotarlos de nueva maquinaria de producción, la cual es elaborada en la zona de La Laguna, en Torreón, Coahuila, lo que les permitirá reducir su consumo de electricidad, combustible y agua.

Dicha iniciativa será prestada en el seno del Consejo Económico y Social, a fin de que los 40 millones de pesos a invertir en una primera etapa sean canalizados de su presupuesto de 200 millones y en cinco años tengamos esta innovación, donde el GDF sea el dueño de la franquicia, de la marca de servicio a prestar a los microindustriales que deseen utilizar esa identificación en su negocio, la cual es elaborada con el apoyo de la Universidad Autónoma Metropolitana.

En ningún momento, aclaró, se trata de regular este mercado, pero sí incidir en su estabilización.