Todo es muy agradable, una recompensa por mi trabajo
, dice el artista brasileño
Ubicada en Río de Janeiro, la naciente institución exhibirá todos los proyectos, esculturas y maquetas realizadas por el arquitecto durante 70 años
Lanzan su canción que dedica a esa urbe
Jueves 16 de diciembre de 2010, p. 5
Río de Janeiro, 15 de diciembre. El arquitecto Óscar Niemeyer festejó este miércoles sus 103 años con un gran regalo: una fundación situada del otro lado de la bahía de Río de Janeiro que, después de Brasilia, acoge el mayor número de sus obras.
Niemeyer, en silla de ruedas, asistió al acto acompañado de su mujer, Vera Lucía Niemeyer, con quien se casó a los 98 años.
Mis amigos vinieron a verme, todo es muy agradable, es una recompensa por mi trabajo
, dijo en breve declaración a la prensa.
La Fundación Óscar Niemeyer, un edificio de mil 600 metros cuadrados en forma de caracol, fue impulsada por el propio artista. El inmueble se construyó sobre un gran estanque de mil 500 metros cuadrados y su costo fue estimado en 5 millones de dólares.
Todas las colecciones de Niemeyer, esculturas, proyectos y maquetas realizadas durante sus 70 años de carrera serán expuestos allí. La fundación forma parte del Camino Niemeyer
, al borde de la bahía, que reúne siete obras del arquitecto (museo, teatro popular y terminal de ferry, entre otras).
La primera, el Museo de Arte Contemporáneo, célebre por su forma de plato volador y que ofrece una magnífica vista de la bahía de Río, fue inaugurada en 1996.
Nacido el 15 de diciembre de 1907 en Río de Janeiro, Óscar Niemeyer concibió más de 600 proyectos arquitectónicos en todo el mundo. Aún dirige varios de ellos, incluida la renovación del Sambódromo de Río, donde se realizan desde 1984 los suntuosos desfiles del carnaval de esa ciudad.
Asimismo, este miércoles se inauguró en la ciudad de Avilés, Asturias, la cúpula del Centro Cultural Óscar Niemeyer.
Estar al lado de los pobres
Por otra parte, Tranquilo de la vida es el título de una canción de samba que el arquitecto compuso hace más de un año, conjuntamente con un enfermero del hospital donde estaba internado tras ser intervenido de la vesícula y de un tumor en el intestino.
Este año, el compositor Edu Krieger –amigo del bisnieto del arquitecto– hizo grabar la canción, que será lanzada esta semana como regalo de cumpleaños por el portal en Internet, Deckdisc.
La letra refleja el cariño de Niemeyer por Río de Janeiro y por sus habitantes, al relatar la historia de un mulato que pasea por la playa tranquilo de la vida
mientras cosecha informaciones sobre las cosas que hay que cambiar
, y se presenta como alguien “que conoce la verdad y prefiere estar al lado de los pobres.
“Allí está todo lo que él dijo a lo largo de las pasadas décadas.
Una mirada más atenta hacia los pobres, una mejor distribución de la renta. Y lo más lindo es que sigue esperanzado. Es una canción de protesta, pero que ofrece flores a la sociedad. Es el reflejo de una sabiduría de 103 años
, dijo Krieger.
Óscar Niemeyer, sin embargo, es modesto: “Mi música es una tontería, una cosita divertida, nada importante. Siempre tuve un vínculo fuerte con la gente de la samba y quería hacer algo elogiando al hombre de la favela”.