Sydney, 17 de diciembre. La policía australiana anunció hoy que renuncia a investigar a Wikileaks, el portal fundado por Julian Assange, al estimar que el sitio de Internet no infringió la ley del país al difundir más de 250 mil documentos secretos del Departamento de Estado de Estados Unidos.

La derivación a la policía se produjo después que la primera ministra Julia Gillard calificó las acciones de Assange como ilegales.

La policía federal completó su evaluación del material disponible y no halló ningún delito en el que Australia pudiera tener jurisdicción, informó por medio de un comunicado.

El Departamento de Defensa australiano sostuvo hoy que la filtración de los documentos no perjudicó la seguridad nacional.

Tras el anuncio de este viernes la policía aclaró su posición y dijo que no es fan de Wikileaks y que el papel de Assange fue “extremadamente irresponsable". Sin embargo, señaló, le corresponde la asistencia del consulado como a cualquier ciudadano.