Ayer fue reportada una toma clandestina conectada a la red principal de Petróleos Mexicanos (Pemex) en la delegación Azcaptozalco. En el predio marcado con el número 24 de la calle Fresnos, en la colonia San Martín Xochináhuac, se extraía el combustible de los ductos de la paraestatal, lo cual pudo derivar en riesgos para las familias de la zona.

Por medio de una denuncia vecinal se alertó al personal de Protección Civil de la delegación, pues un fuerte olor a combustible fue percibido por los habitantes cercanos al domicilio referido, quienes hicieron el llamado de emergencia alrededor de las 10 horas.

El jefe delegacional de Azcapotzalco, Enrique Vargas Anaya, informó que al recibir el llamado de inmediato se realizó la verificación del taller, que prácticamente era un terreno baldío, donde se encontró la toma y en el fondo de uno de varios cuartos se encontraron unas válvulas, con las que presuntamente se extraía el combustible.

También se hallaron tres plataformas, una retroexcavadora, una camioneta, llantas y herramienta mecánica. En los cuartos había costales con cascajo, producto de la excavación para instalar la toma.

Especialistas de Pemex Refinación, sector ductos, confirmaron que en una de las habitaciones se encontró una conexión clandestina con válvula de compuerta y una de globo de una pulgada un cuarto, hacia un poliducto de una pulgada de diámetro, con longitud aproximada de 40 metros.

Señalaron que la toma ya operaba, pues se encontraron restos de combustible, que podría ser diesel, gasolina o turbosina, con escurrimientos a un costado de la válvula ilegal.

El inmueble, que a decir de los vecinos estaba abandonado, carecía de razón social. Durante la revisión los elementos de Protección Civil informaron que al parecer el ducto, por el que se extraía de manera ilegal el combustible, era de una red que cruza la delegación proveniente del estado de México y abastece al Distrito Federal.

El titular de la delegación Azcaptozalco recordó que aún hay tomas de abastecimiento en lo que fue la ex Refinería 18 de Marzo, pues alrededor de 40 hectáreas siguen dotando de gas natural, sale combustible para los aviones, desde aquí se alimenta a la zona de Vallejo y Tlalnepantla.

Luego de una exhaustiva revisión en el taller se hicieron pruebas con explosímetro, que registró niveles de 20 a 40 lies –límite inferior de explosividad–, lo cual confirmó que había combustible, aunque descartó riesgos inminentes.

Por tratarse de un delito federal se dio aviso a la Policía Federal y a personal de Petróleos Mexicanos. Cerca de 20 elementos de dicha corporación resguardan el inmueble.