Por tercer año consecutivo la producción mundial de café arábiga será menor a la demanda, lo que ha elevado los precios en el mercado internacional; el café mexicano se cotiza en 255 dólares, 21 por ciento por arriba del que se dio en la bolsa del grano en Nueva York, asentó en un análisis la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC)

Expuso que la producción nacional del ciclo 2010-2011 permanecerá en 4.5 millones de sacos debido a que los vientos fríos y exceso de lluvias causaron pérdidas en zonas cafetaleras de Veracruz y Puebla. Mientras en Colombia, principal productor del café tipo arábiga lavado –como el que se produce en México– será de nueve millones de sacos, un millón más que el ciclo 2009-2010, cuando la producción normal era de 12.5 millones de sacos.

“Hay incertidumbre entre los productores de café debido a la información de que el fenómeno climatológico de La Niña será el mayor en 50 años y se extenderá a parte del verano y por la especulación financiera en las bolsas de materias primas debido a mayores compras de fondos de inversión”, agregó la organización en la que se aglutinan pequeños productores de Chiapas, Oaxaca, Veracruz, Puebla, Guerrero, Hidalgo y San Luis Potosí.

De acuerdo con la organización, en las regiones cafetaleras de Veracruz y Puebla la producción disminuyó debido a los frentes fríos y las abundantes lluvias, lo que está generando una fuerte demanda y precios por arriba de las condiciones normales de compra de años anteriores.

Los precios por un kilo de café cereza en Coatepec, Huatusco, Ixhuatlán y Córdoba, Veracruz, se colocan entre los 11.50 y los 12 pesos, casi 80 por ciento más alto que en el ciclo anterior, pues durante la cosecha anterior se mantuvieron en 6.40 pesos por kilo; en tanto que el pergamino se elevó a dos mil 900 pesos el quintal.

En las zonas cafetaleras de Oaxaca y Chiapas, los precios del pergamino están entre los dos mil 300 y dos mil 800 pesos el quintal, monto que se rebasa si se trata de los cafés especiales, como los orgánicos y de Comercio Justo. Por esta coyuntura, los productores reciben un precio que supera en 50 por ciento los gastos de producción, tras una década de soportar precios bajos.

De mantenerse los precios altos durante toda la cosecha del ciclo 2010-2011, la cafeticultura mexicana podrá reactivarse, pero deben fortalecerse las políticas públicas de promover más la calidad y el acceso a los mercados de mayores precios de cafés arábigos lavados, de los cuales existe una gran demanda.

El gobierno y las grandes empresas cometen un error al continuar impulsando la producción de café robusta, pues sus precios son la tercera parte de los arábigos lavados. Impulsar el aumento de la producción de café robusta en el país sólo contribuirá a bajar los precios de todos los tipos de café, advirtió la CNOC.