Senadores de los partidos Revolucinario Institucional, de la Revolución Democrática y del Trabajo (PT) apremiaron al gobierno federal a agilizar las investigaciones en torno al secuestro de al menos 40 migrantes centroamericanos y coincidieron en que en los 10 años anteriores se han disparado la violencia y las agresiones contra extranjeros y connacionales que cruzan el territorio con rumbo a Estados Unidos.

El coordinador de los senadores del PT, Ricardo Monreal, el priísta Carlos Jiménez Macías y el perredista Máximo García Zalvidea expresaron, en entrevistas por separado, que el gobierno de Felipe Calderón debe responder por la violencia contra centroamericanos y construir una política migratoria para la frontera sur, centrada en el respeto a la integridad y los derechos humanos, sin importar si los extranjeros que viajan hacia Estados Unidos no tienen documentos.

Monreal advirtió que además de ese secuestro masivo de centroamericanos en Oaxaca, está pendiente de resolver el caso de los 72 indocumentados ejecutados en Tamaulipas en agosto pasado, el cual sigue en la impunidad, a pesar del reclamo de los gobiernos de Guatemala, Honduras y El Salvador.

Sostuvo que tanto la administración de Vicente Fox como la de Calderón han actuado de manera irresponsable y apática en materia migratoria.

Así, a la anterior comisionada del Instituto Nacional de Migración (INM), Cecilia Romero, en lugar de fincarle responsabilidades por no tomar en cuenta la advertencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y de organismos internacionales sobre los nexos entre funcionarios de la institución a su cargo y el crimen organizado, se le premió con la secretaría general de Acción Nacional, señaló.

Monreal insistió en que se debe investigar la complicidad de las bandas de malhechores que secuestran, extorsionan y asesinan a migrantes centroamericanos con funcionarios de migración y de los tres niveles de gobierno.

El priísta Jiménez Macías, vicepresidente del Foro Parlamentario del México-Migrante –integrado por legisladores, iglesias y defensores de indocumentados–, dijo que el secuestro masivo de centroamericanos en Oaxaca y la ejecución de 72 en Tamaulipas exhibe al país internacionalmente con una doble moral, ya que por un lado exige a Estados Unidos respeto a los derechos de los mexicanos indocumentados, pero permite vejaciones, abusos y masacres de extranjeros que cruzan por el territorio nacional.

Con Calderón se vive la época más cruel y vergonzosa en la historia migratoria del país.

Los perredistas García Zalvidea y Rubén Velázquez demandaron además que la Secretaría de Gobernación refuerce las estrategias y acciones del Operativo Paisano de Invierno, con el fin de asegurar un trato digno, de protección y respeto de los derechos humanos de los mexicanos y extranjeros que ingresen, transiten o salgan del país en estas vacaciones de fin año.

Señalaron que de acuerdo con reportes oficiales, la afluencia de connacionales para esta temporada será mayor a la de 2009.

Por lo anterior, consideraron necesario crear mecanismos para garantizar el respeto y la protección de los derechos humanos de los migrantes y para erradicar los altos índices de extorsión, abuso, violencia y corrupción ejercida por parte de los grupos criminales y autoridades mexicanas.

Los perredistas solicitaron asimismo que la CNDH continúe su participación activa en las estrategias y acciones que se realizan de manera permanente por medio del Programa Paisano.