Más de 20 mil 600 millones de dólares ingresaron al país en 2010 para aprovechar las tasas de interés pagadas por el gobierno federal en sus bonos de deuda, denominados en pesos en el mercado local de dinero, indicó el Banco de México (BdeM).

Se trata del mayor monto de recursos del exterior que llegan al país en un año para la compra de valores gubernamentales, precisó el organismo. La participación de los inversionistas externos en el total de los bonos gubernamentales fue tal que tuvo un incremento de 84 por ciento durante 2010, hasta ascender a 577 mil millones de pesos, unos 45 mil 100 millones de dólares en capitales golondrinos, según el argot financiero convencional o capital buitre, como se denomina en algunos medios académicos por el deterioro que ocasionan a las economías a que arriban.

Esos capitales, que al término de 2009 representaban 11.6 por ciento del monto total de bonos gubernamentales en circulación, ahora participan con 19.6 por ciento y figuran como el tercer inversor en importancia entre los poseedores de valores emitidos por el gobierno federal, detrás de las Sociedades de Inversión Especializadas en Fondos para el Retiro (Siefore) y del rubro identificado como otros residentes en el país.

La posesión de ese tipo de bonos por extranjeros es mayor que la realizada por todas las sociedades de inversión del sector privado en su conjunto, las cuales detentan 436 mil 649.8 millones de pesos en valores gubernamentales; supera a la del sector bancario, que posee 326 mil 221 millones, y rebasa ampliamente la adquirida por aseguradoras y afianzadoras, las cuales poseen 136 mil 433.3 millones de pesos.

Según los registros del banco central, el monto en circulación de Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes), bonos, Bondes D y Udibonos asciende a 2 billones 937 mil 641 millones de pesos, de los cuales empresas, otras personas morales y particulares residentes en el país poseen 26.8 por ciento; las Siefore detentan títulos de este tipo por 603 mil 323.1 millones de pesos, equivalentes a 20.5 por ciento del total; los residentes en el extranjero tienen 19.6 por ciento. La tercera parte restante se diluye entre sociedades de inversión, el sector bancario, aseguradoras y afianzadoras.

La dinámica de atracción de capitales externos para su inversión en bonos gubernamentales en moneda local ha sido de tal magnitud, que por sí solos explican el incremento total de la deuda interna denominada en ese tipo de instrumentos.

El monto total de bonos gubernamentales en circulación pasó de 2 billones 691 mil 822 millones de pesos al término de 2009 a 2 billones 937 mil 641 millones de pesos el 16 de diciembre pasado. El aumento fue de 245 mil 818.8 millones de pesos. En tanto, el capital invertido por extranjeros en bonos del gobierno federal tuvo un alza de 263 mil 851.9 millones de pesos en el mismo periodo, lo cual significa que algunos inversores nacionales bajaron su tenencia en valores gubernamentales mientras los del exterior la elevaron.

Algunos investigadores-académicos, en particular del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, han alertado sobre los riesgos que implica mantener sin regulación el ingreso y salida de ese tipo de capitales, la imposibilidad de invertirlos en proyectos productivos y lo oneroso que resulta el pago de intereses para evitar que salgan intempestivamente. Sin embargo, la Secretaría de Hacienda minimiza esos peligros.