Actuarán el 28 de enero en el Blanquita; lanzan su nueva producción, Momentos mágicos
Los muñecos de Texcoco anuncian que realizarán más conciertos y una gira conmemorativa
Lunes 3 de enero de 2011, p. a11
Las botas con polvo acumulado durante cinco lustros de recorrer los sinuosos caminos del rock nacional, los sombreros firmes y la música por delante: así inicia Tex Tex los preparativos para festejar 25 años ininterrumpidos de rocanrolear para la banda mexicana.
Como arranque de la fiesta por su aniversario de plata, Los muñecos –como también son conocidos los de Texcoco– lanzan una producción grabada en vivo en El Faro de Tláhuac en febrero de 2010, Momentos mágicos.
Se trata de 15 canciones representativas del rock rural-campirano-agropecuario-citadino patentado por los hermanos Mújica, creadores del estilo hardtexcoco.
Abre el telón sonoro Feo, fuerte y formal; le siguen Devuélvelo y Cristina. La número cuatro es la emblemática Toque mágico.
En orden de aparición suenan: Pobre rocanrolero, El hijo desobediente, El corrido, Me dijiste, Dulce soledad, Despedazado, Ojos negros, Ahora que no vives conmigo, Adolorido, Estaba loco y Pancho Panchito.
La primera tocada con sabor a festejo se realizará el próximo 28 de enero en el teatro Blanquita, donde se lanzará la nueva línea de recuerdos de los creadores de Cantinero, que incluye –por supuesto– sombreros y botas Tex Tex y parafernalia relacionada con la trayectoria de la banda, que discográficamente dio inició con el LP epónimo grabado en una pequeña compañía llamada Discos Gas.
El disco, en principio, fue vendido y distribuido por Lalo Tex, quien dice: “Ahí iba con mis cajas de discos –que después de mucho rogar me fiaron– en el pesero. Ni carro tenía. A los de la compañía les dije que esa noche tocaríamos en el Magic Circus con Los Caifanes y que seguramente íbamos a vender un buen de discos. Allí me encontré al Chicho –Fernando Arau–, a quien le enseñé –lleno de orgullo– nuestra primera producción. A ver, dijo, mientras me quitaba una caja. ¡Qué chido! –pensé– me va a ayudar a venderlos entre los cuates. Cuando regresó me dijo que ya los había repartido ¡regalados!” recuerda Lalo entre sonrisas y agrega: “Lo bueno es que les dio también a los reporteros y en los siguientes días salieron varias notas.
Eso nos salvó y nos ayudó con los de la disquera, que nos dio más discos para vender. Y hasta nos los entregaron en consignación” comenta el muñeco mayor, con una carcajada de satisfacción.
Un sinúmero de anécdotas salen en la plática: desde su contratación con la trasnacional Ariola, pasando por la forma en que les dieron su carta de retiro, que fue lo mejor que nos pudo haber pasado
dice el guitarrista y cantante de los Tex, quien agrega: “Fue una época buena; de enseñanza, de vivir el sueño de rockstar: viajes –fuimos a Londres, por ejemplo–, conciertos, firmas de autógrafos, chupe, limosinas, ropa...”, rememora el autor de Dulce soledad, quien ya está inmerso en los preparativos para los festejos por sus 25 años en los escenarios rocanroleros.
Habrá sorpresas discográficas y conciertos, acorde a la celebración, así como una gira conmemorativa.
Para más información sobre el festejo, consulte la página de la banda en Internet: www.textex.com