En 2011 se abrirán nuevos nosocomios y clínicas en las estaciones del Metro para que la gente no se tenga que desviar de sus movimientos cotidianos, para ir a lo que son las actividades de prevención y diagnóstico, se ampliarán los horarios de atención y se mantendrán los programas de medicamentos gratuitos y visitas domiciliarias dirigidos a los sectores de alta y muy alta marginación, informó el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon.

La administración capitalina celebró ayer el Día de la Enfermera con un desayuno en el salón Olmeca del World Trade Center, ahí el mandatario aseveró que es el sistema de salud más grande de la República y es más o menos equivalente al de varios países de América Latina, por su magnitud, tenemos 31 hospitales, 250 clínicas, todas las unidades de prevención y una atención aproximada de 3.8 millones de personas.

Por ello, aseguró Marcelo Ebrard Casaubon, ustedes son de las enfermeras más ocupadas del mundo.

Tras recordar que en 2010 la ciudad de México ganó la evaluación a la que se sometió junto con otras 860 ciudades, el mandatario externó que en buena medida el reconocimiento que obtuvo como el Mejor alcalde del mundo se debe en buena medida al trabajo que todos los días realizan las enfermeras.

Agradeció la labor que llevan a cabo al visitar a los adultos mayores y a personas que no se pueden mover, a enfermas y enfermos que ya están en fases terminales. Ustedes son las que van a sus casas, tocan la puerta, los revisan, ven cómo están y les llevan sus medicinas.

Manifestó que el gobierno capitalino hará un gran esfuerzo para mejorar el equipamiento y garantizar el medicamento de todos los nosocomios.

Ebrard Casaubon remarcó que la salud gratuita para todas y todos, así como el acceso a los medicamentos, y educación, son dos prioridades de su gestión.

En reconocimiento a su esfuerzo, el mandatario anunció: como ustedes también son las mejores enfermeras del mundo, vamos a rifar dos coches, uno para cada uno de los servicios, aportados por la Jefatura de Gobierno.

Más tarde, Ebrard Casaubon entregó juguetes a hijos e hijas de los comerciantes de la Central de Abasto, quienes, para despedirlo, le hicieron una alfombra de pétalos de rosas.