En Venezuela tardó la atención: Crónica
insostenible, según diario argentino
Domingo 9 de enero de 2011, p. 8
El diario Crónica, de Argentina, publicó en su edición de ayer una nota titulada Gustavo Cerati: lo que nadie quiere contar
, en la que se da cuenta que el estado de salud del músico se hace cada vez más insostenible
.
El diario afirma: “(...) El último parte médico, según el sitio web del cantante, fue publicado el pasado 2 de diciembre del año pasado. Crónica pudo averiguar varios detalles que fueron ocultados durante seis meses, y el rumor cada vez toma más fuerza desde la clínica Alcla, de menor complejidad, donde la información comienza a filtrarse (...) El último parte médico indica: ‘El paciente Gustavo Cerati se halla compensado hemodinámicamente, sin complicaciones ni intercurrencias actuales. Neurológicamente, presenta signos de reacción al estímulo térmico respondiendo con gestos de retirada. Se continúa con el plan de desconexión de la respiración mecánica (Weaning) con periodos progresivamente mayores de respiración espontánea. El resto de su evolución se mantiene estable.’”
También precisa: “Los detalles que la familia de Gustavo Cerati no hizo públicos tratan acerca de la demora en la llegada de la ambulancia que atendió en un primer momento al cantante en Venezuela. Aunque se destacaba la rapidez de la atención médica, lo cierto es que él habría estado ‘tirado’ casi dos horas en el piso detrás del escenario, esperando auxilio médico. Éste no sólo sería uno de los misterios no develados, sino también el grado de enojo de la familia con la novia del cantante, Chloé Bello, quien habría sido la responsable del consumo en exceso de algunas drogas, de las cuales no se especificaron, y viagra, un verdadero combo explosivo que habría acelerado en más de una oportunidad a Cerati, un hombre de 50 años”.
El informe concluye diciendo: “La atención demorada y los excesos generaron un pacto de silencio entre familiares y varios medios, que juraron no hacer nada público; sólo amigos de parientes, entorno extremadamente cercano, sabían la verdad acerca de lo sucedido, pero siempre trataron de confiar en los médicos de la Clínica Fleni, que incluso no habría querido seguir manteniendo en su centro al cantante para no asumir el ‘costo político’ de una muerte tan popular. Incluso sería la fe de sus fanáticos lo que aún mantendría viva la esperanza de la familia, aunque la realidad sería otra. En la clínica ya no hay esperanza de vida y el rumor sobre el verdadero estado de salud comienza a ser insostenible”.