Soles en la sombra es el título de la más reciente obra de la reconocida dramaturga Estela Leñero, la cual gira en torno a tres mujeres anarquistas durante la Revolución Mexicana y que estrenará la Compañía Nacional de Teatro (CNT) a finales de febrero o principios de marzo, adelanta la escritora.

Con la dirección de Claudia Ríos, la obra se centra en tres mujeres –muy diferentes entre sí– pero olvidadas por la historia de México: Juana Belén Gutiérrez, editora del periódico Vésper, Leonor Villegas Magnon (1876-1955), una aristócrata que se compromete como enfermera y directora de la Cruz Blanca durante el régimen de Venustiano Carranza y que escribió artículos de fuego contra la dictadura de Díaz. Y María Talavera Broussé, activista combativa y compañera amorosa y de ideales revolucionarios de Ricardo Flores Magón.

Cada una de esas tres mujeres se identifica con el movimiento anarquista impulsado por los hermanos Flores Magón.

Belén nació en 1857, en San Juan del Río, Durango, y fue una activista combativa contraos regímenes de Porfirio Díaz y Victoriano Huerta, cuando militó en el Partido Liberal Mexicano y en el Antirreleccionista.

Empezó a publicar desde los 22 años en los periódicos más importantes: El Diario del Hogar y El Hijo del Ahuizote. Fue encarcelada en Minas Nuevas, Chihuahua, en 1897, por un reportaje sobre las condiciones laborales en el mineral de La Esmeralda, en ese estado. Juana Belén fundó la publicación Vésper en 1901 en la ciudad de México, para atacar al clero y al gobierno de Díaz, y por esa publicación fue encarcelada en San Juan de Úlua por tres años, donde conoció a mujeres como Dolores Jiménez, María Dolores Malvaes y Elisa Acuña. Belén, dice, Leñero, empezó siendo anarquista, luego se unió al maderismo y después al zapatismo y más tarde al vasconcelismo. Ella recorrió todos los momentos históricos de la Revolución.

Talavera Broussé nació en 1867 y murió en septiembre de 1946. De acuerdo con ciertos datos históricos, hasta que la edad se lo permitió seguía repartiendo comunicados anarquistas.

En vida, doña María refería a sus amigos cómo le habían quemado sus documentos en Colima: personales y ejemplares del periódico Regeneración. Murió en la miseria y desafiando al olvido.

En la obra Soles en la sombra, explica la dramaturga, en un espacio no realista, cada una se cuestiona su devenir. Conforme se desarrollan las historias van descubriendo hacia dónde van.

Cananea en 1910 y 2010

“Mi interés –prosigue Estela Leñero– comenzó primero con una investigación sobre quiénes eran los ideólogos de la Revolución Mexicana, sobre cuáles eran los pensamientos críticos que marcaron un cambio de conciencia. Por lo que arranqué con los hermanos Flores Magón, de lo que resultó la obra de teatro titulada Derrota luminosa.

“Sin embargo, coincidió que al preguntarme sobre el papel de las mujeres en la Revolución y a solicitud de la CNT, es que se levantó el proyecto teatral Soles en la sombra.”

Con el boato por el bicentenario lo que más se celebró en México, “fue la Independencia y al movimiento revolucionario, tan cerca históricamente de nuestra realidad actual, no se le dio la misma importancia.

“La idea de Soles en la sombra es hacer referencia a nuestro presente. Decir Cananea en 1910 es decir Cananea en 2010, se encuentran luego de 100 años en similares condiciones. Los mineros stán en huelga y reprimidos.

Se habló más de la Independencia, porque hablar de la Revolución era hablar de las demandas de antes y las de hoy, que son las mismas.

Y qué decir del movimiento anarquista, concluye Leñero, está satanizado y borrado de la historia de México.