Pruebas periciales demuestran que dispararon armas de fuego
Miércoles 12 de enero de 2011, p. 29
Temoac, Mor., 11 de enero. El tesorero del ayuntamiento, Ranulfo Carolino Morán Lima, uno de sus hijos y su escolta, fueron detenidos esta mañana por policías federales y ministeriales, como presuntos responsables del asesinato del alcalde Abraham Ortiz Rosales y su hijo de nueve años, perpetrado en este municipio la noche del lunes.
La Procuraduría General de Justicia de Morelos dijo que los indiciados dieron positivo en la prueba de rodizonato de sodio, y tanto el tesorero como su hijo, Hugo Morán Estudillo, y el escolta Hipólito Sanguilán Domínguez tienen antecedentes delictivos.
Morán Lima fue sentenciado a cinco años de cárcel por portación de arma de fuego y purgó tres en el penal de Atlacholoaya. Su guardaespaldas estuvo en la prisión de Jojutla por el mismo delito hasta 2006. El hijo tiene además al menos dos averiguaciones por daños y lesiones dolosas.
La dependencia morelense dio a conocer que policías federales, elementos de la Procuraduría General de la República (PGR) y agentes ministeriales del estado realizaron la detención en la carretera que va a Izúcar de Matamoros, en la colindancia con Puebla.
El procurador Pedro Luis Benítez Vélez precisó en conferencia de prensa que en el sitio del atentado (el crucero Huazulco, en la carretera Temoac-Jantetelco) se recolectaron al menos 14 cartuchos percutidos. El alcalde recibió cinco de los balazos y tanto su hijo como el guardaespaldas Leónides Manlio Pérez también fueron alcanzados; éste último sigue grave.
La esposa del edil abatido, Rosalba Martínez Chávez, un hijo de seis años y otra de ocho, así como un segundo guardaespaldas, fueron dados de alta por los golpes que sufrieron al volcar la camioneta que conducía Ortiz Rosales, quien murió en la ambulancia. Su hijo pereció en una clínica de Cuautla.
El guardaespaldas ileso quedó en calidad de presentado, y los familiares de los fallecidos iniciaron esta mañana las honras fúnebres en la casa del alcalde, en el poblado de Amilcingo.
El padre del edil, Venancio Ortiz, exigió al presidente Felipe Calderón y al gobernador Marco Antonio Adame Castillo castigo a los responsables.