Lunes 17 de enero de 2011, p. 38
La invasión de espacios, ampliación de viviendas de manera irregular, construcción de talleres, conflictos entre residentes, delincuencia y falta de espacios de esparcimiento han generado que en dos de los más grandes desarrollos habitacionales de la delegación Iztapalapa se complique cada más la convivencia vecinal.
Las unidades Vicente Guerrero y Ermita Zaragoza son para el gobierno delegacional dos ejemplos claros de mala planeación de vivienda en la ciudad de México
, pues calcula que más de 10 mil familias viven hacinadas en dichos conjuntos.
De acuerdo con información de la Procuraduría Social del Distrito Federal, 28 por ciento de la población total de la delegación Iztapalapa vive en desarrollos habitacionales, los cuales están clasificados de mediana marginación.
La delincuencia es otro punto de alarma para las autoridades y los habitantes de las unidades porque la falta de espacios de esparcimiento ha provocado que los jóvenes sean presa fácil de la delincuencia.
Ante esa situación, la jefa delegacional de Iztapalapa, Clara Brugada, instalará una estructura delegacional que empezará con la elaboración de un diagnóstico sobre el estado social que prevalece en esas unidades habitacionales.
Dicha estructura, informó, ayudará a la organización en las unidades, con lo que se busca evitar que continúe la invasión de espacios. Recordó que hace unos días se clausuró la construcción de un taller clandestino en la Vicente Guerrero, debido a que se pretendía erigir en un área verde.