La organización defensora de los derechos humanos Amnistía Internacional (AI) criticó ayer al gobierno estadunidense por dar un trato inhumano al soldado Bradley Manning, el presunto informante del sitio de Internet Wikileaks.

Aunque no está acusado, según AI, el cabo primero del ejército, de 23 años, ha estado retenido 23 horas al día en una celda desprovista de almohada, sábanas y accesorios personales desde julio de 2010. De acuerdo con su abogado, lo mantienen despierto y cada cinco minutos debe responder si está bien. Recientemente incluso le quitaron temporalmente la ropa, a excepción de la interior.

Estamos preocupados porque las condiciones a las que se encuentra sometido Bradley Manning son innecesariamente duras y rozan el trato inhumano por parte de las autoridades estadunidenses, sostuvo en Londres Susan Lee, directora del programa internacional de AI para las Américas.

A Manning no se le ha acusado de ningún delito, pero las autoridades militares parecen estar usando todos los medios a su disposición para castigarle durante su periodo de detención. Esto socava el compromiso de Estados Unidos con el principio de presunción de inocencia.

El Departamento de Defensa acusa al joven de traición. Durante el tiempo en el que Manning estuvo estacionado en Irak el analista de los servicios secretos tenía acceso a decenas de miles de documentos confidenciales y supuestamente se los facilitó a Wikileaks.

Activistas pro derechos humanos se manifestaron el pasado 17 de enero afuera de las oficinas de la FBI en Washington para apoyar al soldado Bradley Manning, acusado de filtrar información secreta a WikileaksFoto Ap

El ejército de momento sólo ha presentado cargos en su contra por un video de una intervención militar que apareció en el portal de Internet y que muestra el brutal ataque de un helicóptero contra civiles.

Se cree que Estados Unidos podría considerar a Manning como responsable de la filtración de más de 250 mil documentos secretos de embajadas estadunidenses, que Wikileaks comenzó a divulgar el pasado 28 de noviembre.

El fundador de Wikileaks, Julian Assange, se encuentra actualmente en Inglaterra en libertad condicional. A principios de febrero le espera un proceso que determinará si finalmente es extraditado o no a Suecia, donde la justicia le requiere para interrogarle en dos casos de abusos sexuales.

Assange considera que detrás de su detención se encuentra Estados Unidos, al que acusa de quierer tomar represalias por la publicación de material confidencial delicado en Wikileaks. Sin embargo, el gobierno estadunidense ha negado cualquier implicación en los procesos judiciales contra Assange y califica las suposiciones del australiano de teorías conspiratorias.