Houston, 26 de enero. La representante federal Gabrielle Giffords, herida de un balazo en la cabeza el 8 de enero, abandonó hoy la unidad de cuidados intensivos del Hospital Hermann Memorial y fue trasladada a un centro de rehabilitación en Houston.

Los médicos que la atienden decidieron trasladarla al Instituto de Rehabilitación e Investigación (TIRR) este miércoles al determinar que la congresista estaba lista para ello tras ser elevada su condición médica de seria a buena la noche del martes.

Giffords fue trasladada el pasado viernes a Houston para comenzar su tratamiento de rehabilitación luego sobrevivir a un ataque el 8 de enero en Tucson, Arizona, que dejó a otras seis personas muertas y 13 lesionados.

Agentes de la policía de Houston frenaron el tránsito en algunas partes y una ambulancia escoltada trasladó a Giffords al centro de rehabilitación ubicado a dos cuadras de distancia del hospital alrededor de las 09:30 horas (15:30 GMT).

La legisladora fue internada en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hermann Memorial, con el propósito, se informó entonces, de evaluarla durante unas 24 horas antes de trasladarla al TIRR.

Sin embargo, su traslado al instituto de rehabilitación se pospuso por una acumulación de líquido en el cerebro que tenía que ser drenado a través de un catéter. Un problema común en las lesiones cerebrales por arma de fuego.

El Hospital Hermann Memorial convocó a una rueda de prensa para la tarde de este miércoles a fin de explicar a detalle el estado de salud de Giffords y los planes para su etapa de rehabilitación.

Giffords ha registrado una recuperación que continúa sorprendiendo a sus médicos, al mejorar casi día a día desde que ocurrió el atentado.

La legisladora fue atacada junto con un grupo de personas en un evento público que Giffords denominó como El Congreso en tu Esquina y en el cual la congresista dialogaba directamente con los ciudadanos.

El sospechoso, Jared Lee Loughner, de 22 años de edad, aprovechó que el evento se efectuaba en el estacionamiento de un supermercado Safeway, para disparar 33 balazos contra los asistentes al mismo.

Loughner se encuentra en una prisión federal en Phoenix, acusado de tres cargos de intento de homicidio, aunque tiene pendientes al menos otros dos cargos más por homicidio.