Davos, 28 de enero. El presidente Felipe Calderón aseguró que el proceso de apreciación del peso que registra México es similar al que ocurre en otras economías europeas y la de algunos países emergentes aunque con diferente intensidad. Sin embargo, dijo que más allá de estos movimientos cambiarios, la clave es cómo lidiar (con ello), cómo lo estamos haciendo, con políticas públicas ortodoxas para ganar competitividad en el entorno mundial.

Al término de su segunda participación en el Foro Económico de Davos, Calderón ofreció una breve conferencia para medios extranjeros, en la que aludió también a movimientos de especulación financiera internacional que han alentado también estas modificaciones cambiarias. Asimismo, dijo que en algunas economías europeas la falta de consolidación fiscal y elevados déficits financieros que en opinión de los mercados parecían inmanejables (les) provocaron una fuerte crisis en términos de deuda y credibilidad.

Presume liquidación de LFC

Calderón contrastó esta situación con lo que definió como políticas firmes en México para controlar el déficit público, como la liquidación de empresas públicas ineficientes como Luz y Fuerza del Centro. Por otro lado, manifestó que la recuperación de la economía mexicana se ha reflejado en una mayor proporción de productos nacionales en el mercado de importaciones de Estados Unidos.

El presidente descartó que el incremento de la violencia en el país impacte en la recuperación económica, pues los números revelan lo contrario. Dijo que el crecimiento de 5 por ciento de la economía, un aumento de 53 por ciento de la inversión extranjera en México –19 mil millones de dólares–, consolidándose como destino de inversión y ganancias promedio de 20 por ciento en la Bolsa Mexicana de Valores son reflejo de la consolidación económica nacional.

Tras mencionar que una empresa española y otra canadiense anunciaron nuevas inversiones en el marco del Foro al que acude, Calderón consideró que este saldo económico se ha dado a pesar de momentos muy desafiantes que se ha tenido producto de la inseguridad que el país afronta.

Durante la conferencia de prensa, Calderón hizo un apretado resumen de sus actividades paralelas a la Cumbre. Comentó que Clinton le ofreció sus buenos oficios para el restablecimiento de la Assault Weapons Ban, la ley que prohíbe la venta de armas de asalto que él propuso y estableció en el Congreso de Estados Unidos durante su presidencia y que fue desafortunadamente derogada en 2004.