La doble moral de la sociedad contemporánea, el maridaje entre la política y la Iglesia católica, izquierdas asociadas con la derecha, el Estado que utiliza el poder eclesiástico para sus fines, y viceversa, así como los grandes empresarios que se aprovechan de ambos poderes, es lo que hoy día vemos en México de manera acrecentada, si eso es posible, explicó Felipe Oliva, quien dirige la puesta en escena Tartufo, el impostor, de Molière, con la compañía independiente Nosotros Hacemos Teatro, con 11 años en el medio.

La versión libre de Oliva de El Tartufo representa a un ser hipócrita, necio, cínico, deslenguado y engañifa, quien utiliza la investidura y creencia católica para apropiarse de bienes materiales y para aprovecharse sexualmente de las mujeres, explicó el director.

Para el creador escénico, una cosa es la fe y otra las instituciones, las que a veces fallan. Por supuesto, hay algunos sacerdotes de bien, pero hay muchos que utilizan su investidura para abusar. ¿Por qué (la Iglesia católica) no promueve entre sus fieles la idea de que aquellos que sean pobres se van a condenar en el infierno? ¿Por qué le dicen a la gente que es más fácil que llegue un pobre al cielo que un rico? Eso es pura manipulación.

Preocupado como artista por cuestiones como la violación a los derechos humanos, la pedofilia y el abuso hacia la mujer, Oliva considera que se debe hacer una crítica a la actual situación que se vive en el país. Por ello es que realizó una versión libre de la pieza de Molière.

Suprimí varios personajes, incluso a aquella parte pequeño burguesa en la que el protagonista rinde cuentas al Rey, y donde el autor dice que los príncipes sí cuidan y protegen al pueblo.

La intención de su versión fue la de exhibir, en tono de comedia, cómo se juega y manipula a la gente mediante las creencias religiosas.

Es una interpretación salpicada de referencias contemporáneas, añadió.

Tartufo representa la falsa moral, la hipocresía y la traición. En la versión de Oliva es el consejero espiritual de Orgón, a quien en venganza lo engaña para quedarse con sus bienes, al tiempo que tiene relaciones sexuales con la segunda esposa de Orgón, Elimira, y con la criada Dorina, aunque luego ambas se arrepienten y los repudian. Tartufo, en venganza, también pretende casarse con Mariana, hija del patriarca de la rica familia.

El joven Valerio, prometido de Mariana, junto Elimira y la criada Dorina, fraguarán un plan para probar la hipocresía de Tartufo.

Funciones: viernes a las 20 horas; sábados, 19, y domingos, 18 horas. Teatro Coyoacán, en Eleuterio Mendez número 11, esquina Héroes del 47, a una cuadra de División del Norte, en Coyoacán.