La Habana, 31 de enero. El tribunal provincial de La Habana condenó al ex director del Hospital Siquiátrico, Wilfredo Castillo, a 15 años de prisión por la muerte en enero de 2010 de decenas de pacientes víctimas de frío, informó la televisión.

El juicio concluyó hace nueve días y reveló que entre los enfermos había anemia, a pesar de que el centro recibía más comida de la requerida. Cuatro vicedirectores y la dietista principal recibieron sentencias de entre 7 y 14 años.

Testimonios de familiares indicaron que había dormitorios sin puertas ni ventanas, lo que ratificó la fiscalía. Siete empleados administrativos, de las áreas de almacén y cocina, fueron sentenciados a penas de entre seis y diez años.

La información oficial no ha precisado si se habían realizado inspecciones o auditorías al hospital. Seis meses después de las muertes fue remplazado el ministro de Salud Pública, José Ramón Balaguer, sin que hiciera ninguna declaración sobre el caso.

El primer comunicado, del año pasado, reportó 26 muertes, pero allegados de las víctimas estimaron que podían ser más, tomando en cuenta que muchos enfermos fueron trasladados en estado grave a otros hospitales.

El Siquiátrico de La Habana es una institución emblemática en el sistema político cubano. Durante más de cien años padeció falta de recursos, sobrepoblación y maltrato a pacientes. Al triunfar la revolución de 1959 estaba colapsado y Fidel Castro lo llamó el infierno de Dante.

Bernabé Ordaz, uno de los médicos de la guerrilla de Sierra Maestra, emprendió la regeneración del centro, al que transformó radicalmente, para convertirlo en un ejemplo de atención integral.

Ordaz se jubiló en 2004 y lo remplazó Lorenzo Somarriba, quien ahora encabeza la misión médica cubana en Haití. En 2008 lo sustituyó Castillo.