Ernesto Cordero Arroyo, secretario de Hacienda, calificó la propuesta que pretende bajar la tasa del impuesto al valor agregado (IVA) de 16 a 12 por ciento de argumento bastante sexy; sin embargo, dijo que existe la mejor disposición para analizarla.

Explicó: Cualquier cosa que fortalezca nuestro marco tributario, que nos dé más recursos para enfrentar los retos, será bienvenida, y nosotros estamos esperando que nos formalicen una propuesta, que la podamos analizar y que se hagan los números para empezar a ver. Estaremos en la mejor disposición de analizarla.

Aseguró que aunque la propuesta de reducir impuestos tiene el propósito de favorecer la actividad económica y la generación de empleos, ello es solamente un resultado teórico porque en México nunca lo hemos visto.

En entrevista radiofónica, el funcionario precisó que para realizar cualquier reforma fiscal se debe analizar su capacidad recaudatoria; sobre quién caerá la incidencia de la propuesta fiscal; qué ingreso va a pagar la reforma, así como su impacto inflacionario y que sea consistente con nuestros convenios de doble tributación que existen fuera de México.

Recordó que en los pasados cuatro años en la presente administración se han hecho dos reformas fiscales –las cuales han aportado 2.4 por ciento del producto interno bruto (PIB)–, lo que ha permitido que se haya pasado de una recaudación de ocho por ciento (hace cinco años) a 10 por ciento, y, dijo, se prevé que en 2011 ésta se elevará a 10.4 por ciento.

El titular de la Secretaría de Hacienda expresó preocupación por los elevados niveles de endeudamiento de algunas entidades federativas. Estamos viendo algunos estados que están sobrendeudados, que tienen una deuda de corto plazo que nunca nos imaginamos y sin embargo no recaudan ningún impuesto; no cobran predial, es lo que menos se recaba en México y no utilizan ninguna de las facultades tributarias que tienen, incluso, agregó, en algunos estados incluso están eliminando la tenencia sobre automóviles.

En fin, agregó, hacen una serie de cosas que no está ayudando a fortalecer sus finanzas públicas, y es ahí donde hay una gran ventana de oportunidad para mejorar la estructura tributaria del país.