La demanda superó las previsiones de las autoridades. Desde antes del mediodía, cientos de personas esperaron a que las dos terminales y 30 estaciones de las línea 3 del Metrobús abrieran sus puertas, aunque la falta de información y regulación de los autobuses provocó que esperaran 50 minutos en los andenes para abordarlos, entre empujones, gritos y molestias.

¿Dónde está el ahorro de tiempo que pregonan en sus mantas?, preguntaban usuarios. Otros calificaron de burla entrar gratis, si no podemos llegar a nuestro destino, pues micros y autobuses de las rutas uno, tres y 88 dejaron de circular al comenzar operaciones la línea, tras 20 años de hacerlo cotidianamente, aún cuando los congestionamientos viales continuaron.

Los más de 200 policías distribuidos en el corredor no lograron agilizar el tráfico, pese a obligar al transporte de carga y colectivo del estado de México a circular por las laterales de Vallejo. En los días siguientes esas rutas se reubicarán a avenida Cien Metros, informó el secretario de Transporte, Armando Quintero.

Se integra el grupo más grande de transportistas

Con la puesta en marcha de la línea no sólo se cuenta con 77 kilómetros de vialidad confinada y 290 autobuses, que atenderán diariamente a 650 mil pasajeros, sino también se integra el grupo más grande de transportistas, 430, en una empresa denominada Movilidad Integral de Vanguardia, encabezada por ADO, que asumirá los riesgos financieros, pues los ingresos de los participantes, de 8 mil y 12 mil pesos, no bajarán por ningún motivo, expresó. Agregó que habrá 18 rutas alimentadoras.

La línea 3, sin embargo, abrió con tropiezos. La falta de información sobre las tres rutas a operar y el paso de unidades con leyendas de fuera de servicio provocó que en menos de una hora los andenes estuvieran al tope, a lo cual se sumó la descompostura de un autobús en Balderas y avenida Chapultepec, que interrumpió el tráfico 25 minutos.

Autoridades capitalinas confiaron en que el servicio irá mejorando y pasaremos la prueba de fuego el 28 de cada mes, cuando miles de feligreses acuden a la iglesia de San Hipólito.