Pese a excedentes petroleros, el gobierno federal redujo partidas a estados
Jueves 10 de febrero de 2011, p. 21
La Cámara de Diputados, por medio de su Unidad de Evaluación y Control (UEC), informó ayer que siendo 2009 el año en que el país sufrió su peor crisis económica desde 1994
, el gobierno federal ejerció 7 por ciento más del presupuesto autorizado, pero eso no se reflejó en más empleos ni contribuyó a mejorar la economía. Más aún, reprochó que el Ejecutivo destinara en ese año casi 400 mil millones de pesos en fideicomisos que maneja a discreción
.
El reporte, que se entregó una semana antes de que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) presente sus conclusiones sobre la Cuenta Pública de 2009, refiere que nueve secretarías de Estado y la propia Presidencia de la República no aplicaron las políticas de austeridad y el gasto adicional se utilizó para pago de bonos, compensaciones, compra de inmuebles, publicidad y asesorías.
Por el contrario, refiere que se aplicó un recorte en salud, ciencia y tecnología y que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes incurrió en un subejercicio de 8 mil 999 millones, principalmente en obra pública.
El análisis presentado ayer a la Comisión de Vigilancia por el director de Evaluación y Control de la Gestión Técnica de la UEC, Edmundo Bernal Mejía, señala que a pesar de la crisis, el gobierno de Calderón tuvo excedentes petroleros por casi 26 mil millones de pesos, y aun así el PIB cayó 6.5 por ciento y se perdieron 181 mil empleos.
Esto se explica porque mientras el gasto corriente continuó en ascenso en 2009, el de inversión en infraestructura representó en los primeros tres años de gobierno de Calderón apenas un billón 143 mil millones de pesos, esto es, 3.2 por ciento del PIB, y que descontando el que se hizo en Pemex, fue de sólo 1.4 por ciento del PIB.
Los subejercicios, las reasignaciones y el monto cada vez mayor de transferencias a fideicomisos constituyen una forma de ejercer el gasto que limita su calidad y reduce su potencial como instrumento efectivo de política contracíclica
, porque en un año en el que se requería de crédito para apuntalar las empresas, la banca de desarrollo se guardó la mitad del presupuesto que la Cámara autorizó para proyectos de inversión, concluyó la UEC.
Refirió que al cierre del ejercicio fiscal de 2009, las disponibilidades de la banca de desarrollo ascendieron a 434 mil 200 millones de pesos, el doble del total de las que tenía en 2008, lo cual significó 51.1 por ciento de los activos totales que maneja, lo cual redujo el potencial crediticio de los bancos. Los que más disponibilidades registraron fueron Nacional Financiera y Banobras
.
Además, el informe resalta que el gobierno federal abandonó a los estados y municipios, que en 2009 vivieron su peor crisis económica, al recortar en 54 mil 464.8 millones de pesos las transferencias federales, y detalla que para cubrir ese déficit, los gobiernos locales debieron recurrir a contratación de deuda.
Respecto del sobregiro, la UEC reportó que Los Pinos gastó 717.5 millones de pesos más de lo autorizado por la Cámara (39.9 por ciento adicional), principalmente en remuneraciones especiales, materiales, alimentos, servicios generales y bienes muebles e inmuebles.
La dependencia que más se sobregiró en su gasto fue la Secretaría de Energía, que ejerció 66 mil 195 millones, 51.08 por ciento más de lo asignado por la Cámara, esto es, 22 mil 379 millones pesos, lo cual representó uno de los mayores desbalances porcentuales
en ese año.
Las otras dependencias que gastaron más de lo aprobado fueron Función Pública (62.5 por ciento); Turismo (55 por ciento, explicable por un desembolso de mil 568 millones de pesos en publicidad, 22 mil 760.4 por ciento más de los 8.6 millones autorizados); Relaciones Exteriores (45.3 por ciento); Economía (29.6), y Hacienda (19.3).