ilegalrepresión contra manifestantes
Sábado 19 de febrero de 2011, p. 4
Francia anunció ayer que suspende la exportación de material de seguridad
a Bahrein y Libia, pero sin dar especificaciones, mientras que Gran Bretaña informó que no va a autorizar ninguna exportación que, según nuestro criterio, pueda provocar la prolongación de conflictos regionales o nacionales y que pueda ser utilizada para facilitar la represión interna
.
La decisión del gobierno británico fue difundida por el ministro de Estado de Relaciones Exteriores, Alistair Burt, después de que la prensa británica publicó que en el otoño de 2010 fue aprobada la venta de armamento a varios países árabes, incluidos helicópteros de combate a Argelia.
La organización Amnistía Internacional aseguró que Bahrein –donde el jueves en la madrugada fue reprimida una concentración de opositores con perdigones y gas lacrimógeno– ha importado fusiles de asalto, ametalladoras y gas lacrimógeno de fabricantes británicos.
El 7 de febrero pasado, Francia y Alemania suspendieron la venta de equipos militares y policiales a Egipto, que es, junto con Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Omán y Marruecos, uno de los principales clientes de la industria armamentista.
En Washington, la Casa Blanca emitió un comunicado en el que cita una declaración del presidente Barack Obama, en el sentido de que está profundamente preocupado por el uso de la violencia en Bahrein, Libia y Yemen
.
Por su parte, la alta comisionada de Naciones Unidas para los derechos humanos, Navi Pillay, señaló en Ginebra que la naturaleza y la envergadura de las violaciones a los derechos humanos que tienen lugar en varios países de la región, en respuesta a quienes se manifiestan pacíficamente para defender sus derechos fundamentales y su libertad son alarmantes
, y condenó el ilegal
y represivo uso de la fuerza ante las protestas.