La cifra de artefactos perdidos es de 128; sancionados, 4 militares
Domingo 20 de febrero de 2011, p. 7
En 11 años efectivos del Ejército Mexicano han sufrido robos de armamento y también han padecido la pérdida de pertrechos. Entre las armas que han sido sustraídas o extraviadas se encuentran aditamentos lanzagranadas, fusiles automáticos, ametralladoras y fusiles Barret, capaces de ser utilizados como defensa antiaérea, según datos proporcionados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), a una solicitud de información pública.
De acuerdo con registros castrenses correspondientes al periodo 2000 a 2010 fueron robadas o extraviadas 128 armas, pero 2006 constituyó el año en que más casos se registraron con 43, e inclusive se documentó la sustracción de 37 de ellas de instalaciones del Distrito Federal. Ante dichos actos, la Sedena indicó que solamente ha sancionado a cuatro militares.
La dependencia informó que los estados donde mayor número de incidencias se han registrado son Chihuahua, Durango, Jalisco, Sonora, Guanajuato, Tamaulipas, Chiapas, Nuevo León, y San Luis Potosí, entidades en las cuales se realizan las llamadas operaciones conjuntas contra el crimen organizado, y donde operan organizaciones como los cárteles de Sinaloa, Los Zetas, Golfo y Beltrán Leyva.
Los datos refieren que si bien en las entidades antes mencionadas se suscitaron más de 50 reportes de extravío o robo, el mayor número de armas que fueron sustraídas ocurrió en instalaciones militares de la ciudad México, ya que tan sólo en 2006, en un solo caso desaparecieron 33 ametralladoras MP-5.
La información oficial señala que las armas que más han sido robadas o extraviadas tienen que ver con fusiles mosquetones, pistolas nueve milímetros, fusiles automáticos, carabinas, ametralladoras, y en el año 2008 un fusil Barret, así como aditamentos lanzagranadas.
El reporte castrense indica que los únicos sancionados por pérdida o robo han sido Jesús Dario Espinoza Chanona, sentenciado a un año 11 meses y 20 días de prisión; Joel Arias Velázquez, a cuatro años un mes y cinco días de prisión y una multa de 4 mil 760 pesos; Álvaro Pérez Santiago y Luis Rey González fueron condenados a cinco años de prisión y multa por 8 mil 760 pesos.