Debido a que la Cámara de Diputados aún no designa a los consejeros faltantes, ayer la Comisión de Quejas del Instituto Federal Electoral (IFE) registró un empate en la resolución del dictamen para resolver el recurso del PRD contra el cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval, la arquidiócesis de Guadalajara, el arzobispado de la ciudad de México y su vocero, Hugo Valdemar.

Por ello, el dictamen de la secretaría ejecutiva será el que se presente ante el Consejo General la próxima semana.

En dicho dictamen se considera fundados los agravios atribuidos tanto al arzobispado de México como su vocero, Hugo Valdemar, porque incurrieron en violaciones al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales por instar a no votar por el PRD, en el contexto de sus críticas por la aprobación de los matrimonios entre personas del mismo sexo en la ciudad de México, en agosto pasado.

Sin embargo, en el dictamen se exonera a Sandoval Íñiguez y a la arquidiócesis de Guadalajara porque no hay elementos de prueba que acrediten que ambos exhortaran a votar o no por un partido, como lo hicieron los anteriormente mencionados.

Si el Consejo General del IFE aprueba el dictamen, sólo quedaría acreditada la violación en los casos mencionados y se turnaría el expediente a la Secretaría de Gobernación, única instancia responsable de sancionar a ministros de culto y asociaciones religiosas.

El representante del PRD, Rafael Hernández, consideró que el desempeño del IFE se quedó a la mitad, pues si bien en los casos de Valdemar y el arzobispado representan un precedente inédito por señalar la violación a la ley –si es que así lo corrobora el Consejo General– en el caso de Sandoval se quedaron cortos al considerar que no hubo violaciones.