Tras la suspensión de la consulta ciudadana para decidir el presupuesto participativo –la cual se debió realizar el domingo pasado–, autoridades del Distrito Federal cuestionaron la responsabilidad de las instituciones para lograr que la ciudadanía participe en este tipo de procesos.

El titular del ejecutivo local, Marcelo Ebrard Casaubon, hizo público su compromiso de generar mejores condiciones para realizar dicha consulta, con la cual se definirá el destino de más de 681 millones de pesos.

Al recibir ayer por la tarde en su despacho del Antiguo Palacio del Ayuntamiento a representantes vecinales de 10 Comités Ciudadanos de la delegación Venustiano Carranza, Ebrard destacó que, luego de que el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) comunicó la imposibilidad de realizar dicha consulta, se ajustarán los detalles para realizarla en las mejores condiciones y sin ninguna premura.

El presidente del Consejo General del IEDF, Gustavo Anzaldo Hernández, explicó que este organismo no canceló la realización de la consulta vecinal.

Nosotros nunca dijimos que se cancelaba; lo que estamos viendo es que no había las condiciones para llevarlo a cabo, aseguró. Anzaldo detalló que esto se debió a fallas estructurales de la propia normatividad del esquema de participación ciudadana.

Como instituto creemos que hay muchas partes incluidas en la ley que no nos correspondería llevar a cabo, porque nuestra función debería quedar agotada con la integración de los órganos de representación; sin embargo, se nos han dado otro tipo de atribuciones que en un momento dado sería más fácil llevarlas a cabo si fueran autónomas, independientes y fueran responsabilidades exclusivas del instituto, aseguró.

Anzaldo aceptó que esta situación mina la confianza de los ciudadanos en las instituciones.

Por su parte, el dirigente del PAN capitalino, Obdulio Ávila Mayo, demandó la aplicación de sanciones al Gobierno del Distrito Federal, al IEDF y a la Asamblea Legislativa por la cancelación de la consulta vecinal.