El Centro de las Artes de San Agustín (CaSa) Etla, Oaxaca, proyecto del artista Francisco Toledo, cumplirá su primer lustro el 21 de marzo.

Para reforzar su labor, el pasado 19 de enero el gobernador Gabino Cué Monteagudo firmó un decreto mediante el cual se le confiere la naturaleza de un organismo descentralizado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, sectorizado a la Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca.

Como parte de los festejos, el domingo 20, a las 12 horas, será inaugurada la exposición Jan Hendrix: 10 vistas. También se entregarán los premios CaSa de literatura en lengua zapoteca, poesía, narrativa y canción, a los ganadores del certamen convocado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, el Instituto Nacional de Bellas Artes, Editorial Calamus y el CaSa.

Por el premio, consistente en 20 mil pesos y un grabado de Toledo, participaron 122 trabajos.

A las 19 horas, pero en el Teatro Macedonio Alcalá de la capital, Alejandra Robles ofrecerá un concierto a beneficio de las poblaciones afromestizas de la entidad.

Respecto del decreto sobre el CaSa, Lourdes Báez Meza, directora del recinto, expresa: Trabajamos con el maestro Toledo para avanzar en la consolidación de su proyecto artístico-social. No podemos decir que hemos terminado de construir una metodología ni que todo lo que hay que hacer se ha hecho. Pero se han dado algunos pasos en ese sentido y uno de los más relevantes es que finalmente se consiguió que por decreto el centro tenga personalidad jurídica y patrimonio propio, algo necesario para la estabilidad del CaSa.

Diálogo con la comunidad

–El decreto, ¿será un apoyo frente a los cuestionamientos que el CaSa ha enfrentado?

–Otorgarle personalidad jurídica le da la posibilidad de tener acuerdos de otra naturaleza frente a la comunidad y las instituciones en general, sin necesidad de pasar por otras instancias que a veces son caminos más largos. De cualquier manera, nuestro diálogo y puente con la comunidad inmediata de San Agustín deberá fortalecerse, por lo que tenemos que estar pendientes.

–¿Cómo es la relación con la comunidad en este momento?

–Hemos trabajado y avanzado mucho en los vínculos con la comunidad. Muchos de los programas del centro tienen que ver con eso. Todo el año pasado el maestro Toledo creó diseños para la producción de objetos y se capacita a una parte de los habitantes para trabajar en la producción de esos diseños.

“Digamos que el maestro Toledo, las bordadoras y algunas tejedoras de San Agustín están produciendo, así como alfareros; además, tenemos otras comunidades, como Teotitlán.

“Asimismo, trabajamos con la Universidad Autónoma Chapingo en la construcción de proyectos de mejora de la calidad de vida, como huertos de traspatio, compostas caseras, reforestación y cultivo de hongos.

“Tenemos varias maneras de atender a la comunidad. Hay niños que todos los sábados asisten al CaSa. Consideramos que el centro es fundamentalmente de la comunidad oaxaqueña, pero prioritariamente de la de San Agustín Etla. Creo que ha mejorado mucho la relación.

Se ha comenzado a comprender cuál es la naturaleza del centro y cómo es importante para San Agustín.

Entre las atribuciones que ahora tiene el CaSa, está la de constituirse como el primer Centro Ecológico para las Artes en el estado de Oaxaca, creando un espacio interinstitucional destinado a fortalecer la educación artística en el estado, la región y el país, mediante programas de formación, experimentación, investigación, creación, gestión y difusión de las distintas disciplinas artísticas, bajo una perspectiva de cuidado y mejora del medio ambiente de la región donde se ubica.

También, desarrollar programas académicos diversos, destinados a la formación, profesionalización y actualización de personal docente que se desempeña en el área de la educación e investigación artísticas.

Asimismo, fortalecer programas de becas en favor de estudiantes de escasos recursos, para que ello no sea limitante de su desarrollo artístico, promover y difundir manifestaciones del estado de Oaxaca, la región y el país y “atender a la población estudiantil y al personal docente del sistema educativo del estado de Oaxaca, por conducto del programa ‘Arte y escuela’, mediante programas de educación artística en la escuela y formación de maestros”.

El teatro, nueva vertiente

Los bienes y derechos que constituyen el patrimonio del CaSa, se equiparán a los del dominio público, por lo que serán inalienables, imprescriptibles e inembargables; sólo podrán gravarse previa autorización de la Junta de Gobierno y bajo el más estricto cumplimiento de las disposiciones aplicables.

Báez Meza manifiesta que se ha trabajado mucho en diseñar una oferta académica y de servicios que tenga sentido no sólo para los artistas, sino para la comunidad en general. Se trata de construir un diálogo entre artesanos y artistas, para que produzcan de manera conjunta.

A partir de las coordenadas de CaSa –comunidad, arte sustentable, medio ambiente y diálogo intercultural– en el centro se impartieron el año pasado 250 talleres y se tuvo alrededor de 2 mil alumnos, todo eso siempre de la mano del maestro Toledo.

Como el CaSa también quiere atender el teatro, el lunes 21 se presentará Desazón, de Víctor Hugo Rascón Banda, gracias al apoyo de la Compañía Nacional de Teatro; el viernes 25 se montará la obra infantil El pájaro Dziú, basada en un cuento maya de Marcela Castillo, y el sábado 26 Asesinada por la vida: Frida, de Fernando Martínez Monroy, con la compañía ATAR.