Al inaugurar la cuarta Conferencia de la Organización Mundial de Parlamentarios contra la Corrupción (GOPAC, por sus siglas en inglés), el presidente de ese organismo, Naser al Sane, demandó a los legisladores de 45 naciones ahí reunidos no desperdiciar el tiempo en reformas burocráticas, sino escuchar con cuidado las preocupaciones de sus pueblos, para saber lo que está ocurriendo y no despertarse de pronto en medio de una revolución.

El ex parlamentario de Kuwait advirtió que las revueltas que se han dado en la región de donde él viene tienen su origen en la inconformidad de los ciudadanos por la gran corrupción de los gobiernos dictatoriales que acumularon enormes riquezas mientras la población carece de lo básico.

Por su parte, el secretario de la Función Pública, Salvador Vega Casillas, quien asistió al acto en representación de Felipe Calderón, aprovechó el foro para pedir que se aprueben las dos iniciativas anticorrupción que el Ejecutivo envió al Senado a principios de este mes.

En su intervención, el presidente de esa cámara del Congreso, Manlio Fabio Beltrones, le respondió: De poco sirve que hagamos nuevas legislaciones si no vienen acompañadas de la voluntad política de los gobernantes para atacar la corrupción.

El priísta advirtió, asimismo, que poco podríamos avanzar si simplemente pensamos que el tránsito de un gobierno o de un partido político a otro es la solución simple, automática y mágica.

Antes, el titular de la Función Pública dijo que de aprobarse las dos iniciativas de Calderón serán las herramientas más firmes para combatir la corrupción en el sector público y en las relaciones de éste con el sector privado.

A su vez, el coordinador de los senadores del PAN, José González Morfín, comentó que en Xicoténcatl han puesto manos a la obra para impulsar iniciativas que permitan combatir el flagelo de la corrupción y mandar a la cárcel a todos aquellos que incurran en corruptelas.

El coordinador perredista, Carlos Navarrete, expuso, en tanto, que la corrupción no es exclusiva de los régimenes autoritarios, y en el caso de México el régimen presidencial con un partido que gobernó durante siete décadas generó prácticas de corrupción inmemorables.

Aludió a la frase del ex presidente Álvaro Obregón: no hay un general que aguante un cañonazo de 50 mil pesos, y sostuvo que pese a los avances logrados, la corrupción permanece, y de acuerdo con el Foro Económico Mundial, le cuesta a los mexicanos 9 por ciento del producto interno bruto y a las empresas 10 por ciento de sus ganancias.

De no combatirse la corrupción, se pondrá en grave riesgo la democracia y el futuro de México, insistió Navarrete.

Nasser Al Sane recalcó que movimientos de liberación, como los que se han dado en Egipto, Túnez, Libia y Yemen deben hacer pensar a los legisladores que tienen que cambiar sus prioridades e impulsar a esa juventud que está cambiando el mundo.

En los regímenes que cayeron, y de los que están en proceso de caer, advirtió, la constante ha sido la corrupción de los gobernantes.

El senador del PAN Ricardo García Cervantes, presidente del capítulo mexicano de la GOPAC, expuso que ese acto refleja el compromiso para combatir la corrupción, recuperar la esperanza y devolverla a los jóvenes y niños.

La presencia de 241 parlamentarios de 45 países pone en el centro de la atención el necesario combate a la corrupción y su vínculo con la pobreza.

Durante la primera mesa de trabajo, García Cervantes advirtió que el grave problema de la corrupción en los gobiernos es que ésta es solapada por los partidos, y viceversa, con el afán de conseguir permanencia en posiciones de poder.

Por ello, subrayó, la corrupción amenaza el proceso de transición y la consolidación democrática de las naciones.