Tegucigalpa, 18 de marzo. El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, declaró hoy estado de emergencia en el sistema educativo tras la muerte de una profesora durante la intervención de la policía frente al Instituto Nacional de Previsión Magisterial (Inprema), para dispersar una manifestación.

Luego de tres semanas de protestas en demanda del pago a 6 mil docentes y contra una ley que faculta a las alcaldías para dirigir el sistema educativo en cada región, el jefe del Ejecutivo, electo tras un golpe de Estado y un gobierno de facto, emitió un decreto por el cual se contratarán, de manera temporal, nuevos maestros en remplazo de los huelguistas.

El decreto establece además que los maestros que impartan clase gozarán de la protección del Estado para su labor, y suspende salarios a los profesores en paro, y con los mismos recursos retribuir a los nuevos maestros.

El gobierno lamentó la muerte de la profesora, de 59 años, quien murió atropellada por maestros que intentaban huir de la policía. El estado de emergencia declarado en el sistema educativo excluye al nivel superior.

En Honduras este año se matricularon al menos un millon 500 mil alumnos en el nivel escolar y 60 mil en el secundario. La planta de maestros es de unos unos 60 mil en las escuelas públicas.